El liderazgo de Santiago Abascal al frente de Vox parecía a todas luces incuestionable y su reelección como presidente debería de haber transcurrido cual jinete en su caballo entre un camino de rosas. Pocos esperaban que en la tercera formación política de España tras su meteórico ascenso en las últimas elecciones aparecería una lista alternativa liderada además por un canario, el médico Carmelo González, exdirector de Comunicación del partido en Las Palmas -fue cesado minutos después de anunciar su candidatura- y que no sólo aspira a tomar las riendas del partido, sino que además recurrirá las elecciones internas al considerar que se han cometido supuestas irregularidades que han dado lugar a un proceso de tintes "bolivarianos".

El oscurantismo ha sido la tónica de este proceso, según denuncia González. En primer lugar, desconocen el número de afiliados al corriente de sus cuotas que marca el porcentaje mínimo de avales que se necesitan para optar a la dirección del partido. A pesar de que la lista alternativa lo ha solicitado por numerosas vías, no se les ha facilitado "un censo electoral fiable y demostrable". Según el Comité Electoral de Vox, se necesitarían al menos 4.941 apoyos para presentarse como candidato y aseguran que mientras que el equipo de Abascal superó esta cantidad con creces, los críticos no llegaron ni a los 200. "Si esto fuera cierto, yo mismo me encargaría de presentar mi dimisión como aspirante ante tan malos resultados", asegura González, que duda mucho de la veracidad de estas cifras ya que asegura que sólo en la provincia de Cádiz la lista alternativa superó los 400 avales porque así se lo comunicaron los propios militantes que apostaron por dar un giro más moderado al partido.

Un sustento que lograron a pesar de tener en contra al aparato oficial del partido, con una mayor presencia mediática y económica, y que además se encargó de no poner fácil el camino de los críticos, según explica su líder, que asegura que la única candidatura anunciada por Vox a los militantes mediante un envío masivo de correos electrónicos fue la oficial, y omitieron la existencia de la lista alternativa, a pesar de que fue presentada en tiempo y forma. A esto se suma que en el Comité Electoral hay dos miembros que también forman parte de la candidatura de Santiago Abascal, es decir, "que son juez y parte", critica González, que tacha esta práctica de "chusca" y "bolivariana".

Si el recurso presentado de manera interna por los críticos no prospera, González asegura que no les temblará el pulso a la hora de acudir a los tribunales para aclarar la legalidad de estas elecciones. "Ellos han cometido el error primero de cesarme y luego de ningunearnos, y eso se ha vuelto en contra del partido", se lamenta , ya que asegura que la intención de su equipo no era la de dañar a la formación.