El incendio que la calima, el calor y el viento provocaron en la localidad de Tasarte, en el municipio de La Aldea de San Nicolás (Gran Canaria), ya está controlado. Esta declaración ha permitido que todos los vecinos desalojados han podido volver a sus viviendas excepto los residentes de las cuatro casas declaradas como inhabilitadas, que se han reubicado en residencias cercanas. El fuego sigue activo, pero tan solo arden tocones (parte del tronco de árbol), según confirmó el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales.

En concreto, la noche del miércoles ardieron una treintena de tocones en la zona del Cortijo de Inagua y una decena en Lina. También se han recibido llamadas de la zona de Tasarte por reavivarse algunos puntos calientes contra los que han actuado efectivos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria que se encuentran en la zona. De todos modos, atendiendo a la evolución del incendio, han decidido el repliegue de los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que aún participaban en las tareas de extinción, así como la retirada de los dos Canadair, que en el día de hoy no han realizado ninguna descarga.

Morales añadió, en todo caso, que permanecerán vigilantes hasta que haya "humo cero". Asimismo, el jefe de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, Luis Fernando Arencibia, apuntó que ahora el "mayor riesgo" está en los troncos que arden en cuanto a que "en un momento se puedan fracturar" y baje el fuego. Por ello, se mantiene efectivos en la zona y sobre esto el coordinador de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria, Federico Grillo, matizó que el operativo que trabaja a partir de ahora cambia en función de la evolución de la situación. Por la mañana se quedaron unas 50 personas y por la noche también lo hizo una brigada y un equipo PRESA. Según la situación de esta madrugada, se adoptará la decisión de poner más o menos personal.

Ayer también operaron dos helicópteros, según Grillo que apuntó que los dos hidroaviones "no" son necesarios ahora, si bien puntualizó que se traen con carácter preventivo porque la situación "preocupaba mucho" con la previsión del viento del norte en la zona que transcurre entre el Aula de la Naturaleza y la Degollada de Las Brujas, porque hubiera bajado y podría haber afectado hacia la zona sur, pero como quedó la situación "más benigna" se quedan para "echar una mano".

Dificultades en la extinción

Morales destacó las "dificultades" que han tenido los medios de extinción para atajar este fuego, afirmando que "han sido enormes" porque ha habido vientos "huracanados", "imposibilidad" de emplear los medios aéreos por las condiciones meteorológicas que ha afectado estos días a la isla, así como porque había "demasiado combustible" en los alrededores de las viviendas. En relación con ello, hizo un llamamiento a los ciudadanos para que mantengan limpio los alrededores de sus viviendas, así como resaltó que ante este tipo de situaciones las personas deben colaborar cuando se les insta a ser evacuados porque "en muchas ocasiones" pusieron en un "grave riesgo" a los operativos que luchaban contra el fuego.

En cuanto al daño natural, el presidente de Gran Canaria, Antonio Morales, indicó que se cree que es "menor" porque se ha producido en superficie aunque afirmó que ha tocado a pinocha. Actualmente se mantiene la superficie de 1.000 hectáreas quemadas pero se prevé que sea "menor" una vez se pueda analizar in situ. Si bien, expuso que no se han producido afecciones en zonas ganaderas, sí que se conoce que se han visto dañados algunos animales domésticos. Para analizar el total de los daños, una vez que ya está disponible el informe definitivo de las viviendas afectadas elaborado por el Consorcio de Emergencias del Cabildo, se trasladará el mismo al servicio de Arquitectura y de Viviendas de la institución insular, y se estudiará con el alcalde de La Aldea la próxima semana.