Ha llegado a la política estatal en una etapa bastante convulsa y crispada, ¿qué sensaciones tiene sobre lo que está pasando y qué deriva puede tener en el Parlamento nacional?

Es verdad que he llegado a la política en una etapa convulsa pero también interesante porque tengo el reto de que he sido elegido para atender y resolver los problemas de la ciudadanía. Empecé participando en las primarias en Gran Canaria y los compañeros depositaron su confianza en mí y después todo el PSOE arrimó el hombro. No fue fácil porque hay que darse cuenta de que hemos sido reelegidos por dos veces -en abril y en noviembre- además de las otras tres elecciones que hubieron en mayo, es decir, municipales, autonómicas y europeas. Hubo una sinergia total en el partido y la ciudadanía respondió confiando en el PSOE para ganar las cinco elecciones. Es cierto que hay un problema en Cataluña, una situación económica y dificultades en el empleo o una realidad migratoria, pero los que somos responsables políticos debemos dar respuesta a estos retos al igual que lo debe hacer la sociedad civil.

¿Pero no es difícil sustraerse de la crispación y el ruido político y mediático para trabajar en lo que importa a la ciudadanía?

En las últimas semanas el interés de la mayoría de medios ha estado más en el pin parental o en la situación de Venezuela cuando realmente hay cosas mucho más importantes que se han hecho por el Gobierno como el aumento salarial de los funcionarios, la subida del SMI o la revalorización de las pensiones. El enfoque de los problemas del país no es al que nos quiere llevar la oposición y es triste porque cuando estoy en el Congreso a veces siento vergüenza de la oposición. El Gobierno ha sido elegido democráticamente en las urnas con un partido que ha ganado las cinco elecciones del año pasado, lo que significa que los ciudadanos han elegido quién debe llevar las riendas de este país, que necesita una oposición creíble, leal y con nivel como lo tuvimos que hacer nosotros cuando gobernaba el PP. España necesita cambios de calado pero me pregunto dónde va a estar el PP cuando llegue el momento de hacerlos y si va a seguir condicionado por la ultraderecha. ¿Qué hará el PP cuando tengamos que tocar ciertos aspectos de la Constitución? ¿O en relación con los cambios en el Poder Judicial o el debate sobre la ley de Educación? Sabemos lo que va a hacer Vox pero el PP debe estar a la altura de un partido de la oposición serio y responsable.

Tras la marcha de Elena Máñez encabeza los diputados canarios al menos por Las Palmas ¿cómo asume esta responsabilidad y los objetivos para esta legislatura?

Durante la campaña tuvimos encuentros con muchas organizaciones y movimientos no gubernamentales, cooperativas, pescadores, empresarios, sindicatos, etcétera, y lo que nos demandaban lo tenemos que trasladar a la actividad política. Es cierto que Elena Máñez se ha ido pero también desde cualquier espacio se puede trabajar conjuntamente. Asumo la responsabilidad que me corresponde, la realidad de Gran Canaria la asumiré junto a los dos senadores por la Isla y no habrá problemas en este sentido porque no solo tenemos que cumplir con los compromisos de la campaña electoral, sino también con el trabajo orgánico en todas las agrupaciones junto a los compañeros de las otras islas.

¿El hecho de que por primera vez en 26 años el Gobierno de Canarias

Es lo que pedíamos en la campaña electoral a la ciudadanía, es decir, votar al PSOE para que hubiera mejores sinergias entre los dos gobiernos. Ángel Víctor Torres está gobernando en Canarias, también estamos en el Estado y hasta ahora los problemas que han surgido en Canarias se están solventando con un trabajo de corresponsabilidad en cuestiones como los incendios forestales del verano o la quiebra de Thomas Cook. Ya no hay la confrontación permanente que había con Coalición Canaria, lo que no significa que no se vaya a exigir lo que corresponde a las Islas tanto nosotros, como diputados, como Torres como presidente del Gobierno canario, pero al menos las formas han cambiado y los contenidos son otros.

Hay temas prioritarios para Canarias en esta nueva legislatura como el presupuesto del Estado, el cumplimiento del REF y del Estatuto, los convenios... ¿Cómo se van a abordar?

¿Alguien tiene dudas de que el Gobierno central no los va a cumplir? Un ejemplo es la carretera de La Aldea que ya está en marcha cuando debería haberse iniciado mucho antes de que llegara el PSOE al Gobierno canario. Hay una gran diferencia en la forma de hacer las cosas y en conseguirlas. Sobre el REF canario ¿alguien tiene dudas de que el Estado no lo va cumplir? Dejemos al menos que tengamos nuevo presupuesto del Estado, creo que no vamos a defraudar porque queremos cumplir con los compromisos.

¿Como analiza este repunte de pateras hacia Canarias?

Si no hay posibilidades de entrar por el Mediterráneo o por Marruecos, la única vía que le queda a la población inmigrante es ir por el Atlántico. Hay veces que se olvida que siguen vivos varios conflictos africanos como el Congo, Malí o Eritrea, por lo que se producen grandes desplazamientos de población y la única alternativa que les queda es buscar un país que les pueda acoger. Canarias es España y es la frontera sur de Europa y lo que no se puede omitir en Europa es que los movimientos migratorios son estructurales y no coyunturales, por eso se tienen que abordar como una realidad social global. Pero también digo como africano que el continente tiene que asumir su responsabilidad porque no es concebible que un continente como África, siendo el más rico de todos, no se gestione desde la Unión Africana, organización con la que debería haber más complicidad a nivel internacional para incidir en el respeto a los derechos humanos. Las migraciones no se pueden abordar país por país porque van a seguir fracasando, por eso la UA y la UE tienen que definir las prioridades de los movimientos migratorios, entre ellas el trabajo regulado y una cooperación real donde se incida más en la educación, la sanidad y la agricultura.

¿No están algo sobrepasados tanto el Gobierno canario como el Ministerio del Interior por esta situación?

Acaba de constituirse un Gobierno en el Estado y el Gobierno autonómico ya tiene algo de recorrido, aunque también es un gobierno de coalición. Creo que la cumbre que tendrá lugar esta semana definirá los pasos a seguir y, aunque siempre hemos dicho que las migraciones es una competencia estatal, debe existir una cooperación para poner los medios necesarios para que los inmigrantes sean atendidos. Para mejorar la realidad migratoria, debe impulsarse un pacto de Estado sobre inmigración para actualizar la ley de Extranjería al siglo XXI, no podemos seguir con una ley de 1985 que ha sido modificada hasta cinco veces.

Usted que vivió la crisis de los cayucos de 2006 ¿ve similitudes con el actual repunte y que podría pasar lo mismo?

No. En aquellos momentos había días que recibíamos hasta tres y cuatro cayucos con 80 y hasta 120 personas en cada uno pero hoy los que llegan son en patera. Insisto en que se tiene que incidir en la cooperación y en la implicación de los países africanos de donde proceden los migrantes. Desde el Gobierno de Canarias también se podría hacer más, no solo en la atención y acogimiento de los migrantes, sino también en trasladarse a Mauritania, Gambia, Senegal o Cabo Verde porque la cercanía en términos políticos, de cooperación y de entendimiento le vendría bien a Canarias.

Estos días hay polémica por la repatriación de malienses a Mauritania, que pueden acabar en su país siendo una zona insegura ¿Conoce la situación?

Cuando dicen que se repatrían personas a Mauritania no se trata de un país en conflicto. Lo que no es legal es que se deporten a personas que son de Mali si han pedido refugio, pero no creo que el PSOE haga cosas que no sean legales. Creo que a todas las personas que se están repatriando se les mira los expedientes de forma escrupulosa si hay convenios con sus países de origen. Si se dice que se están repatriando a personas a países en conflicto puede llevar a confusión, pero creo que las repatriaciones que se hacen son de forma legal.