La Fiscalía de Medio Ambiente cita a declarar el próximo 5 de febrero al representante legal de la Heredad de Aguas de Arucas-Firgas (HAAF), al anterior presidente y al actual, en calidad de investigados por el incendio originado en Valleseco el pasado verano y que se llevó por delante más de 12.000 hectáreas.

El Ministerio Público considera que hay indicios de que no se adoptaron medidas adecuadas para el mantenimiento de los tendidos eléctricos que eran de su propiedad y todo parece indicar que la cercanía de la masa forestal con ese tendido de tensión media fue lo que originó el incendio iniciado en el barranco de Crespo.

También han sido citados como testigos, para el día 6 de febrero, el responsable de explotación de E-Distribución (antigua Endesa, Distribución Eléctrica, SLU), un trabajador de la Heredad y el responsable de Electrimega, SL, que era la empresa que tenía contratada la Heredad para el mantenimiento de sus torretas y los sistemas eléctricos.

Tres meses antes del incendio y a 100 metros de su origen, también se originó un conato que afectó una hectárea y media y que fue sofocado de manera rápida. Un hecho que ha estado investigando el Cabildo de Gran Canaria ya que el tendido eléctrico "se encontraba en mal estado y además no se había retirado la maleza".

El fuego ocurrido el 6 de mayo de 2019 quemó una superficie que había sido reforestada con laurisilva y que fue sofocada por los técnicos forestales y bomberos con rápidez, lo que evitó que se extendiese y se volviese aún más catastrófico. Una situación que se puso de manifiesto y que, pese a la advertencia, originó en agosto un gran fuego que afectó de forma irreversible a un 10% de la superficie de bosque de la Isla, y provocó que unas 10.000 personas fuesen desalojadas