El nuevo modelo de CIE del que lleva hablando el ministerio del Interior desde enero de 2019 y al que alude desde hace meses el Gobierno regional por el aumento de llegada de pateras a las Islas trata de diluir buena parte de las críticas de jueces, el Defensor del Pueblo y organismos nacionales y exteriores. El plan ha incluido hasta ahora mejoras en los equipamientos de Tenerife y Gran Canaria, así como en los de Murcia, Valencia, Barcelona, Madrid y el Tafira, en Cádiz. Las obras se anunciaron con un plazo de un año, si bien el nuevo centro de Algeciras requería un total de tres años. El presupuesto global ascendía a 33,627 millones de euros y los trabajos los ha ejecutado la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado (SIEPSE). El proyecto tiene como gran referente el nuevo CIE de Algeciras, al que deberán parecerse el resto de los reformados. Este centro, a concluir en dos años y con 500 plazas, se levanta en una parcela de 20.000 metros cuadrados en un terreno cedido por el Ayuntamiento de la ciudad gaditana en mayo de 2017 en el que no se había ejecutado nada.
