El lío en el Grupo Mixto del Congreso sigue sin resolverse. El intento de los partidos minoritarios para evitar un grupo de 21 diputados en la nueva legislatura, entre ellos la diputada de CC, Ana Oramas, y el diputado de NC, Pedro Quevedo, que haría inviable el normal desempeño de su trabajo parlamentario y reduciría sus medios económicos y técnicos, se ha visto frenado en un primer momento por los servicios jurídicos de la Cámara. La Mesa del Congreso decidió ayer por unanimidad "inadmitir" los dos grupos parlamentarios que pretendían constituirse al margen del Mixto, el denominado España Plural -en el que se integraba Oramas junto al diputado del PRC, el de Teruel Existe, y los dos de UPN-, y el Grupo Múltiple -compuesto por los ocho de JxCat, los dos de Más País, el de Compromís, y el del BNG-.

Paralelamente, la Mesa ha dado de plazo hasta el próximo viernes para que estas formaciones puedan presentar nuevas propuestas de creación de grupos parlamentarios que dividan el Mixto, una decisión que contó con la oposición del PP y de Vox al considerar que ya debería quedar constituido el Mixto con los 21 escaños originales. "No quedan en el limbo, sino en el grupo que les corresponde reglamentariamente", argumentaron populares y ultras.

Los dos representantes nacionalistas canarios en el Congreso se mostraron ayer contrariados por la decisión de la Mesa y consideraron "discutible" la interpretación que los servicios jurídicos de la Cámara ha hecho de las circunstancias que afectan a los partidos y diputados que registraron las propuestas. Esos informes señalan que ninguna de las dos propuestas cumple las exigencias del Reglamento para tener grupo parlamentario propio. En todo caso, CC y NC se suman a los intentos del conjunto de los diputados afectados para encontrar otra fórmula que permita el objetivo final de poder dividir en al menos dos grupos distintos el actual grupo Mixto, y creen que la opción de formar un grupo de más de 15 diputados es la más operativa de entre las que podrían utilizarse de acuerdo a las exigencias del Reglamento.

Ese grupo alternativo estaría integrado en principio por los dos nacionalistas canarios, el JxCat, Más País, Compromís, PRC, Teruel Existe y BNG; Quedarían integrados en el Mixto los dos de la CUP, los dos de UPN, y el de Foro Asturias. Una vez constituidos ambos grupos, algunos de los diputados del más numeroso, con nombre todavía por decidir, podrían pasarse al otro para equilibrar su composición.

La presidenta del Congreso, Maritxell Batet, explicó ayer a los medios de comunicación que los informes jurídicos habían sido claros y determinantes sobre el incumplimiento de la norma interna de la Cámara por parte de los dos grupos que pretendían constituirse al margen del Mixto, y que no había por tanto otra opción que "inadmitir" ambas peticiones. Detalló que, por lo que respecta a España Plural, uno de sus componentes, Navarra Suma, se presentó como coalición de UPN, PP y Ciudadanos, aunque sus dos diputados electos sean del partido regionalista, por lo que no pueden estar en un grupo propio diferente a los de sus compañeros de candidatura.

De otro lado, el informe recuerda que Oramas no se presentó en solitario, sino en coalición con Nueva Canarias, y que la alianza entre ambas formaciones isleñas no llegó al 15% de los votos en el conjunto de las dos circunscripciones donde se presentaron, uno de los requisitos que establece el Reglamento para poder formar grupo propio. La diputada tinerfeña sí lo consiguió en su circunscripción de la provincia occidental canaria, pero no lo hizo Quevedo en Las Palmas, y el informe considera que ambos resultados deben ser contemplados de forma global. Por tanto, sólo el Partido Regionalista de Cantabria y Teruel Existe cumplirían con los requisitos para la creación del grupo España Plural.

Respecto al Grupo Parlamentario Múltiple, el informe jurídico señala que los cinco partidos y 12 diputados que lo pretendían integrar no alcanzaron el 5% de votos del total de España que se exige, sino que se quedaron en el 4,88%.

Pedro Quevedo aseguró ayer que, más allá de la valoración que se pueda hacer sobre el informe de los servicios jurídico del Congreso, la decisión de la Mesa de ampliar el plazo para presentar nuevas propuestas para partir el Mixto es un reconocimiento explícito de la imposibilidad de que el grupo pueda funcionar con 21 diputados. "La Mesa tiene que ser proactiva y el problema no puede resolverse con criterios estrictamente jurídicos, hay que afrontarlo con criterios políticos para garantizar la representación de los ciudadanos que han votado a todas estas formaciones", afirma. Según él, el hecho de que la Mesa haya dado un nuevo plazo, indica que "hay voluntad de buscar alguna solución".

La fórmula del grupo de más de 15 diputados ya se barajó antes de registrar el de España Plural y Grupo Múltiple. El PSOE y Unidas Podemos, con mayoría absoluta en la Mesa, apostaban desde el principio por esta fórmula y así se lo sugirieron a los interesados, que optaron sin embargo por intentar las otras considerando que una interpretación flexible del Reglamento, como se ha hecho en otras ocasiones, lo permitiría. El diputado de Compromís, Joan Baldoví, también la defendió como la más oportuna y ayer insistió en que "la única opción inapelable es registrar la petición de un nuevo grupo parlamentario técnico con 16 diputados". "El objetivo es dividir el grupo Mixto en dos y garantizar así los derechos los electores y la operatividad del trabajo de los diputados", comentó el político catalán.