El Ejecutivo regional busca fórmulas para restringir la publicidad de las casas de apuestas y se plantea una serie de acciones para limitar la incidencia del juego, sobre todo entre los jóvenes, entre ellas el aumento de la fiscalidad -medida que ya está contemplada en el proyecto de ley de presupuestos de 2020-, el incremento de las inspecciones y la distribución geográfica de las casas de apuestas con el fin de alejarlas de los centros educativos y de zonas de riesgo.
El consejero de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad, Julio Pérez, recordó ayer que su departamento elabora una nueva ley del juego aunque también se plantea un posible decreto ley para acelerar la adopción de medidas para hacer frente a este fenómeno que preocupa a los grupos parlamentarios. De hecho ayer el consejero tuvo que responder a tres preguntas sobre el mismo asunto a Coalición Canaria, el PSOE y Nueva Canarias, en las que los diputados alertaron sobre el incremento que se está detectando de estos locales en las calles de las Islas.
Sin embargo, el consejero regional evidenció su preocupación más por los juegos a través de internet que por los locales físicos que están en las ciudades canarias. De hecho, Julio Pérez indicó que la distribución de los mismos están al 40% de su capacidad real en las Islas, por lo que todavía podrían crecer más.
El problema es mundial, aseveró el consejero, y en cuanto a la posibilidad de tomar medidas como suspender las autorizaciones de nuevas casas de apuestas, como han hecho las comunidades de Navarra, Extremadura y Madrid, explicó que no es necesario porque no hay peticiones para abrir más salas, al menos por el momento.
El diputado del grupo Nacionalista (CC-PNC) David de la Hoz destacó la importancia de atajar los problemas como la ludopatía, que aumenta con la proliferación de las casas de apuestas y por el juego en línea. Reclamó la limitación de la publicidad a favor del juego, si bien reconoció que las competencias no son del Gobierno canario. En este sentido expresó su preocupación por los colectivos más vulnerables.
