El grupo de Podemos en el Parlamento regional no comparte ni el fondo del cambio en la ley de Cabildos de 2015 ni que se opte por una enmienda a los presupuestos para propiciarlo. Tras mostrar sus dudas a este periódico el pasado martes y su oposición a priori a lo pretendido, el diputado Manuel Marrero se reunió este miércoles en la sede de su grupo con la portavoz de Podemos en el Cabildo grancanario, consejera de Arquitectura y Vivienda y funcionaria de carrera, Concepción Monzón. La cita sirvió para transformar sus dudas en un rechazo convencido al contenido de la enmienda que impulsa el PSOE y a la vía elegida para hacerla realidad, flexibilizando aún más la elección de directores generales.

Marrero cree que la situación aconseja que los cuatro grupos del Pacto de las Flores la aborden en una reunión (no necesariamente en la mesa del acuerdo) porque, aparte de las diferencias sobre el fondo y sus consecuencias, se incumple también la máxima del Gobierno en esta legislatura de no usar las enmiendas a las cuentas para colar, por la puerta de atrás, modificaciones de otras leyes, como si fuera un cajón de sastre y sin la fiscalización que sí hace el Consejo Consultivo de los presupuestos antes de ser enmendados.

Marrero es consciente de que este tipo de disensos se iban a producir entre los firmantes del pacto y, de hecho, apuesta por afrontarlo sin mayor problema. Es más, en caso de que no alcancen un acuerdo, no teme romper la disciplina de voto sin que esto deba concebirse como una crisis grave. No obstante, tanto Monzón como Marrero, que se han reunido con representantes de funcionarios, creen que, lejos de que las administraciones insulares emulen en esto al Gobierno, debe ser la Comunidad la que apruebe una norma similar a la Ley de Cabildos de 2015 para limitar al máximo la discrecionalidad en la elección de directores generales y de otros cargos, por muy políticos que se conciban y siempre bajo los criterios de publicidad y concurrencia en concursos públicos, así como formación, experiencia y capacidad. Monzón pretende mantener esta postura en su Cabildo por más que su presidente, Antonio Morales, apoye el cambio.

Según fuentes consultadas, y aparte del impulso de la presidenta del Cabildo de Lanzarote, Loly Corujo, la enmienda se ha trabajado, sobre todo, en el Cabildo tinerfeño.