Gustavo Santana, que se ha incorporado a la Viceconsejería de Empleo desde la secretaría general de UGT en las Islas, ha imitado a la responsable de la Consejería de Derechos Sociales, Noemí Santana, y también ha hecho otro corta y pega de las memorias de los presupuestos del anterior Gobierno de Coalición Canaria (CC). Los principales programas de Empleo en el proyecto presupuestario para 2020, es decir, las directrices a seguir por el nuevo equipo, son un calco de los de 2019, con el agravante de que son de los menos trabajados de las cuentas públicas. El programa para el fomento del empleo, por ejemplo, se limita al mismo único párrafo desde el comienzo de la pasada legislatura, con lo que las siete líneas con que se despacha la memoria de este programa en el proyecto de ley se mantienen inalterables pese al cambio de Gobierno.

Las memorias presupuestarias contienen las estrategias de los programas de gastos, con los objetivos y resultados que se pretenden alcanzar. El cambio político en el Ejecutivo regional tras casi 30 años de gobiernos liderados por CC no ha impedido que los principales programas del área social y de Empleo, departamento que depende de la Consejería de Carolina Darias y en el que ahora ejerce como viceconsejero el ex secretario general de UGT en la Comunidad Autónoma, sean copias literales de los de 2019. De hecho, la reproducción exacta es incluso más evidente en el caso de Empleo que en el de Derechos Sociales, donde el grueso de los objetivos y acciones a desarrollar también son copiadas del anterior presupuesto (incluidos los párrafos en que el anterior equipo sacaba pecho por su gestión).

Al margen del programa de fomento del empleo, también son exactamente iguales a los de 2019 los de dirección y gestión del Servicio Canario de Empleo (SCE); inserción y reinserción de desempleados; refuerzo de estabilidad en empleo y adaptabilidad; refuerzo de la capacidad empresarial; integración laboral de personas con especiales dificultades; y modernización del SCE.

Noemí Santana explicó ayer en su cuenta de Facebook que la práctica de fusilar las memorias de los presupuestos del Gobierno precedente es un mal generalizado en todas las consejerías, las actuales y las de anteriores Ejecutivos. Pero se da la circunstancia, al margen del cambio de tendencia política y de la reprobación a Cristina Valido, de que las cuentas aún en vigor (que CC pudo sacar adelante gracias a los apoyos parlamentarios del PP y la Agrupación Socialista Gomera) fueron enmendadas en su totalidad por los partidos ahora en el Gobierno (incluido Podemos y con la excepción de ASG). Aunque es posible encontrar objetivos y acciones que se reproducen literalmente en muchos programas presupuestarios, es igualmente cierto que las otras consejerías se han aplicado más y mejor en la tarea de modificar la estrategia plasmada por el anterior Gabinete, de modo que los objetivos y la hoja de ruta se adaptan a los nuevos retos, a las actuales circunstancias y al rumbo que cada responsable político quiere imprimir en la nueva etapa. Son varios los ejemplos.

El programa de relaciones con la administración de justicia (de la consejería del socialista Julio Pérez) pasa de cuatro a ocho objetivos, y también se han modificado las acciones para conseguir esas metas. En Sanidad, que gestiona el PSOE, se incorpora en el programa de atención especializada una nueva estrategia relacionada con la salud mental y también se adaptan las directrices en atención primaria. Y el lavado de cara es patente en el caso de Turismo. En la Consejería que dirige Yaiza Castilla (ASG) han entrado a fondo en el rediseño del programa de infraestructuras turísticas y gestión integral de núcleos turísticos o planificación turística. Hay también ejemplos en el programa de biodiversidad, donde ya se habla de la plaga de termitas en Tenerife, o el de gestión patrimonial, que supone un nuevo modelo de gestión en consonancia con las nuevas directrices políticas. Es más, la memoria del nuevo programa de gestión patrimonial, que en los actuales presupuestos se despacha en dos folios, es uno de los mejores ejemplos de una correcta praxis, ya que se elabora desde cero tomando lo válido del anterior documento pero añadiendo todo un nuevo corpus.

En cualquier caso, la consejera de Derechos Sociales ahondó en que lo importante en un presupuesto no son las memorias, sino "cómo se dotan las partidas, cómo se gestionan y cómo se ejecutan". Santana detalló que los presupuestos de su departamento incluyen un 11% más de fondos para política social, igualdad, diversidad y juventud. "Casi 50 millones más que sitúan a esta Consejería entre las prioridades del Gobierno de Canarias", agregó la también líder de Podemos, que en última instancia descargó la responsabilidad del copia y pega en los funcionarios "que son quienes han elaborado esas memorias y que cada día ponen sus esfuerzos y trabajo para que la maquinaria funcione".

La antecesora de Santana en la Consejería, Cristina Valido, indicó que ya en el Parlamento, cuando Santana presentó los presupuestos de su área, le había reprochado a su sucesora que hiciera copia y pega de una ley que había querido enmendar en su totalidad. "Es curioso que no solo se mantengan las líneas de los programas, sino que se copien párrafos en los que se diseñan los objetivos políticos", subrayó.

Las claves

  • Memorias de los presupuestos. Las memorias de los presupuestos públicos son la herramienta que establece el vínculo entre la asignación de recursos públicos, es decir, entre la cantidad que se destina a determinado ámbito, y los resultados que ha propiciado ese empleo de fondos públicos. Es la razón de ser de los presupuestos estructurados por programas, ya que sirven para perfeccionar la asignación de los dineros públicos a partir de la información que proporcionan los resultados cosechados. Así pues, son tan importantes como las cifras.
  • Objetivos y acciones. La inconsistencia de las memorias presupuestarias no radica en que se copie la mera descripción del programa, sino en que se calquen los objetivos y, sobre todo, las acciones con que se pretenden lograr esos objetivos. Especialmente en un caso, como el de Canarias, en que se ha producido un cambio de Gobierno que conlleva un histórico cambio de color político, lo que no ha evitado que se asuma una estrategia ajena que, como el resto del presupuesto, se había enmendado.

Un texto de Santana que aplaude a Valido

La práctica del copia y pega no solo es una mala praxis presupuestaria, sino que, además, genera evidentes contradicciones. Es lo que le ha ocurrido a Noemí Santana, que en más de una ocasión calificó de "catastrófica" la gestión de su inmediata antecesora en el cargo, Cristina Valido, y que, sin embargo, aplaude sin pretenderlo las medidas que la nacionalista y su predecesora en el mismo Gobierno (la socialista Patricia Hernández, que ocupó el cargo hasta diciembre de 2016) pusieron en práctica en el área. No en vano, el copia y pega alcanza incluso a aquellos párrafos en los que el anterior equipo al frente de la Consejería ponía en valor sus medidas, que fueron criticadas por Podemos.

En concreto, la memoria del programa de dependencia de los actuales presupuestos, cuando aborda la tragedia de esas personas que fallecen sin haber sido atendidas pese a tener reconocido el grado de dependencia, hace hincapié en "el esfuerzo realizado por este departamento a través de las distintas medidas adoptadas", un esfuerzo que "ha supuesto que la brecha entre personas fallecidas sin recibir atención haya experimentado una leve reducción". Este reconocimiento explícito a la labor de Valido aparece en el proyecto de presupuestos para 2020, y aún más en contradicción con el discurso mantenido por Santana, también al destacar "el dato positivo de la evolución de la gestión de la dependencia en los últimos tres años y medio" que supone "el aumento significativo de las prestaciones del sistema, pasando de las 12.567 a finales de 2014 hasta llegar a las 23.3678 en agosto de 2019".