Canarias será la única comunidad autónoma de régimen común -todas menos las dos regiones forales: Navarra y el País Vasco- que cerrará el año con superávit. Es decir, que dará carpetazo a 2019 con más ingresos que gastos. Y lo hará a pesar de que también es la comunidad de régimen común que más ha incrementado el gasto con relación a 2018. Al menos hasta julio, justamente el mes en que se produjo el cambio de Gobierno y Ángel Víctor Torres relevó a Fernando Clavijo en la Presidencia. Hasta ese momento, el Ejecutivo canario había disparado el desembolso público un 11,6%, una extraordinaria subida que ayer confirmó la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y que solo en una de las restantes 16 autonomías fue incluso mayor, en concreto en la foral Navarra (12,8%).

Las previsiones sobre el cierre de 2019 de Fedea, uno de los think tank o fábrica de conocimientos más reputados del país, sitúan al Archipiélago en el particular podio de la disciplina fiscal y presupuestaria. Navarra (1,3%), el País Vasco (0,6%) y Canarias, situada entre las dos comunidades del norte peninsular con un 0,7%, serán las tres regiones que despedirán el ejercicio en superávit. En el caso de las Islas, esto quiere decir que si se cumple el escenario que prevén los expertos de Fedea, los ingresos superarán a los gastos en el equivalente a un 0,7% del PIB regional. Solamente otras tres autonomías, Galicia -que dirá adiós a 2019 en equilibrio presupuestario-, La Rioja y Baleares -estas dos con un ligero descuadre del 0,1%-, serán también capaces de cumplir el objetivo de déficit, fijado precisamente en un -0,1% del PIB.

La previsión de Fedea coincide ya con la del Gobierno de Canarias, que inicialmente, cuando Román Rodríguez aterrizó en la Consejería de Hacienda, avisó que la Comunidad Autónoma caería en déficit excesivo e incumpliría la regla de gasto de no corregirse el rumbo. Fuentes del Ejecutivo explicaron que se siguen dando pasos para disponer de más dinero para la agenda social -la redistribución del Fdcan le reportaría unos cien millones de euros, otros 38 millones pueden venir por justificaciones de obras del convenio de carreteras y otros alrededor de 30 por la reprogramación de las anualidades del convenio de infraestructuras sociosanitarias, por ejemplo-, pero puntualizaron que el cumplimiento de la regla de gasto, que básicamente limita el desembolso público con independencia de cuánto se ingrese, conduce a un nuevo superávit. Un superávit que es fruto, precisaron, de los ajustes que se han hecho para evitar el incumplimiento por el incremento del gasto hacia el final de la legislatura.

Fedea corrobora ese mayor desembolso público, que atribuye en general a las prisas de los Gobiernos ante la cercanía de las elecciones y que en el caso de las Islas casi duplica a la media nacional (11,6% frente a un 6,6%). Hay que recordar, eso sí, que el anterior Ejecutivo de CC advirtió de que pensaba incumplir la regla de gasto y que el destino del dinero serían la Sanidad y educación públicas y una progresiva política de alivio fiscal en favor de hogares y empresas.

CC sospecha que la deuda del Estado en carreteras irá a parar a los bancos

El Grupo Parlamentario Nacionalista afirmó ayer que el presupuesto del Gobierno de Canarias del próximo año incumple los objetivos del Pacto de las Flores y destina 558 millones adicionales "a pagar a los bancos", un 60,2% más, hasta superar los 1.400 millones para saldar deuda bancaria. Así lo expusieron en rueda de prensa el portavoz parlamentario, José Miguel Barragán, y la diputada Rosa Dávila, quienes rechazaron las "recetas" del nuevo Ejecutivo para hacer frente a un posible escenario de recesión económica y destrucción de empleo. En CC sospechan que el Gobierno ha renunciado a exigir al Estado que libere del corsé de la regla de gasto los 500 millones de la deuda del convenio de carreteras que el Ministerio de Hacienda computó el año pasado, y sin previo aviso, como superávit, lo que imposibilita su uso para todo aquel fin que no sea precisamente pagar deuda bancaria.

Barragán comentó que el aumento de gasto corriente, la bajada de inversiones y la subida de impuestos conducen a las Islas a un "agujero negro de incertidumbre", pues dejan de gastar casi 100 millones ?los computan como superávit a final del ejercicio? y "renuncian" a negociar los 500 millones del convenio de carreteras, "que cogen para pagar a los bancos". En esa línea, se mostró "sorprendido" por que el Ejecutivo vaya a "cumplir a rajatabla" la ley de estabilidad presupuestaria y no haya querido negociar con los bancos cuando la Comunidad Autónoma "no tiene un problema de deuda" y en los últimos años se logró contener.

Barragán, que puso también sobre la mesa el incumplimiento de la ley de servicios sociales en su primer año de vigencia porque no llega a los 55 millones, resumió las cuentas en que hay "menos dinero para las políticas del Gobierno y más dinero para los bancos". En cuanto a las inversiones territorializadas, el nacionalista avisó que es "la primera vez" que bajan en todas las Islas, ironizando sobre que ahora "las bolsas de gasto son buenísimas y antes eran malísimas", dijo en relación a las habituales críticas sobre el reparto de fondos entre islas.