La consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Teresa Cruz Oval, aseguró ayer que su departamento trabaja a marchas forzadas para desarrollar a tiempo la oferta pública de empleo (OPE) con la que prevé que 7.198 trabajadores de diferentes especialidades accedan a una plaza en el servicio sanitario público de las Islas. "Estamos centrando todos nuestros esfuerzos en no perder la OPE de 2016", recalcó Cruz Oval, ante el Pleno del Parlamento regional, en alusión a la proximidad del 12 de diciembre, fecha en la que vence el plazo en el que deben convocarse estas oposiciones.

Este trabajo "contra reloj" no ha impedido que surjan tensiones entre la Consejería y las organizaciones sindicales, que, de hecho, consideran a Cruz Oval "no válida" como interlocutora y han amenazado con huelga si los procedimientos selectivos no se llevan a cabo según el calendario previsto, que fue fijado con la anterior Administración sanitaria. El incumplimiento de los plazos supondría, entre otras cosas, que las pruebas no coincidiesen en el tiempo con las de otras comunidades autónomas, lo que, a juicio de los representantes de los trabajadores, podría crear un efecto llamada de aspirantes procedentes de otros lugares del país. Sin embargo, la consejera sostuvo que el calendario tiene carácter meramente "estimativo" y que así lo acreditan las actas de las reuniones de la mesa sectorial, que esgrimió ante los diputados de la Cámara.

Pese a las duras críticas recibidas, la titular del departamento se refirió a las tensiones con los sindicatos como "desencuentros normales". "No hay nada roto. El diálogo es fluido", señaló. Además, Cruz Oval precisó que no todos los sindicatos presentes en la mesa sectorial de Sanidad tienen una postura "idéntica".

La "macro OPE", tal y como la definió la responsable de las políticas sanitarias de la Comunidad Autónoma, contempla 7.198 plazas, de las que más de 1.600 corresponden a enfermería, otras tantas a auxiliar de enfermería y 1.039 a facultativos.

La consejera se remitió a la pasada legislatura para explicar algunos de los problemas que experimenta el proceso de empleo público. Así, recordó que antes del cambio político no se había publicado la gran mayoría de las convocatorias de los procedimientos selectivos, que corresponden a 101 categorías distintas. Asimismo, acusó al anterior gobierno de provocar en 2018 la pérdida de 312 plazas de facultativos "porque llegaban las elecciones y no querían conflictos con los sindicatos".

"En tres meses ha roto todos los puentes. Le han planteado una huelga y no es capaz de estar en las mesas sectoriales", recriminó a la consejera el diputado del PP Miguel Ángel Ponce, médico de profesión, que le transmitió el desánimo de los profesionales que aspiran a consolidar su plaza y que "estaban ilusionados".

Por parte de CC-PNC, José Alberto Díaz Estébanez expuso que los sindicatos han considerado que la consejera "no es de fiar". "Les engañó al decir que las pruebas coincidirían con las de otras regiones para evitar el efecto llamada", señaló el parlamentario nacionalista.

En respuesta a la diputada Nereida Calero, también de CC, Cruz Oval anunció un proyecto para compartir especialistas entre Lanzarote y Fuerteventura que podría extenderse para paliar el déficit que sufren las islas no capitalinas.