En un día de rayos, lluvia intensa por momentos y zonas, con un retraso de media hora en su vuelo desde Madrid y mucha prisa por marcharse a otro mitin en Las Palmas, el presidente del Gobierno en funciones y candidato del PSOE, Pedro Sánchez, exhortó ayer en Tenerife, y acompañado del ministro de Fomento, José Luis Ábalos, a acudir de forma masiva a las urnas el 10N y concentrar el voto progresista en su persona. Una petición que reitera tras el 28A pese a reconocerse "en deuda" precisamente por la repetición electoral con los que le votaron en abril y los que lo hicieron por otras fuerzas pero con la prioridad de desbloquear el país y dar estabilidad.

Lo hizo en un Paraninfo de la Universidad de La Laguna lleno (600 personas), aunque sin el entusiasmo de la precampaña del 28A en Arona. Eso sí, la exhumación de Franco ha devuelto a la familia socialista muchas sonrisas, orgullo de pertenencia y esperanzas en reforzarse en las urnas.

En lo que sí hubo mucha reiteración por parte de Sánchez fue en sus conocidos compromisos con las Islas ("el Gobierno está con Canarias"), si bien acotados ayer, sobre todo, a la reciente firma del convenio de Las Chumberas, al anillo insular y al plan de 500 millones en todo el país tras la quiebra de Thomas Cook. Unas ayudas que sabe "insuficientes", pero que resalta por haberse consensuado con empresarios e instituciones, al tiempo que ligó esta incertidumbre a la del brexit.

Sánchez elogió de entrada a Ángel Víctor Torres por "defender siempre el municipalismo", llevar la cercanía al ciudadano a gobiernos superiores y "dar la cara", lo que cree que quedó resumido con su actitud y "liderazgo" en el incendio de Gran Canaria. Luego, subrayó que se necesita en Madrid un gobierno "empático y que no confronte" con Canarias para resolver los problemas isleños.

Ya sobre el 10N y el resto de desafíos del país, censuró a Pablo Iglesias que "siempre" diga que el PSOE gobernará con la derecha "cuando nunca lo hemos hecho en 40 años y cuando la cruda realidad es que, en 4 años, ha votado 4 veces en nuestra". A su vez, censuró al PP por aliarse con Vox, "que dice que somos un partido criminal y mancha la memoria de 13 mujeres (las 13 Rosas) que lucharon por la libertad". Por supuesto, le afeó de nuevo a Albert Rivera que quiera saltarse el Estado de Derecho y meter a políticos en la cárcel. En uno de sus arranques irónicos, más o menos preelaborados pero bien interpretado, presentó al líder de Cs como ejemplar de "liberal ibérico", sin tampoco ser muy generoso con Pablo Casado, negando que la madurez la den una barba o no insultar: "Ser moderado es no pactar con la ultraderecha, no insultar es ser educado", dijo. Sobre Vox, alertó sobre su intención de derogar, entre otras, la ley del aborto, de memoria o violencia de género y se pregunta si PP y Cs no tienen nada que decir.

"Progreso y coherencia"

Frente a esto, recalcó que el PSOE ofrece "progreso, coherencia y solidaridad. Para el 28A, decíamos que si queríamos avanzar o retroceder 40 años y la gente fue clara. El 10N tenemos que responder a la pregunta de si queremos continuar bloqueados". A su juicio, el bloqueo es el principal problema político, por mucho que sean claves otros desafíos, como las pensiones, el salario mínimo, el mercado laboral o la incertidumbre económica. Sobre esto último, insistió en ser realista, pero remarcó que España sigue creciendo y creando empleo, por lo que rechaza cualquier visión catastrofista, rechaza las recetas que aplicó el PP ("recortes, corrupción de subida fiscal a las clases medias") y denuncia la falta de cualificación económica en el PP y Cs, así como huidas como la de Lacalle (portavoz económico del PP que se fue tras el 28A).

Por eso, sostiene que "hay más motivos que nunca para ir a votar ahora y, además, concentrando el voto en el PSOE como la opción que evitará ese bloqueo".

Sobre el bipartidismo, indicó que son demócratas y que no tienen problemas con un Congreso más plural, aunque avisando de que eso no debería ser sinónimo de bloqueo. "Por eso, una España movilizada es una España desbloqueada que necesita de un gobierno estable y coherente, y más tras lo de Cataluña. La gente entiende ahora cuál ha sido nuestra posición sobre esto", avisando sobre dónde estaría el país y la izquierda con un Gobierno junto a Podemos en el que unos, el PSOE, "defiendan la Constitución y otros, hablaran de presos políticos".

Ahondando en este conflicto, insistió en que siempre han defendido lo mismo, "con firmeza, pero sin aspavientos y buscando la estabilidad y el mayor consenso". De ahí que criticara a Casado y Rivera porque, tras reunirse con él por la reacción a la sentencia, dentro le dijeron una cosa y ante la prensa "ya pedían la dimisión del ministro del Interior. Solo les pido que apoyen al Estado, que fue lo que hicimos nosotros" durante 2017. A su juicio, Rivera lleva el 155 tatuado en la frente y Vox pide el estado de excepción: "Si es así como quieren apoyarme, mejor dejarlo, pero menos mal que esto lo estamos haciendo nosotros, ya que el Gobierno de Rajoy fue un fábrica de independentistas, pero con estos tres de la derecha de ahora tendríamos una factoría".

También ironizó con que Torra "me llame ahora todos los días", pidiéndolo que haga una llamada antes inteurbana a los líderes de la oposición catalana y a los familiares de los policías heridos por las protestas de los violentos. "Lo que vimos fue un enfrentamiento de los violentos contra la sociedad catalana, no contra los policías, que estuvieron en medio".

Se esperaba mucho lo que diría respecto a Franco y se arrancó con una frase muy descriptiva: "No me habían dado tanto las gracias como esta semana. Ha sido muy emocionante ver el acto de dignidad del que fuimos testigos con el fin del mausoleo al dictador, pero me sentí aún más orgulloso como presidente porque esto es una victoria, sobre todo, de la democracia española. Y no deja de ser sorprendente que se hiciera historia y algunos respondieran con histeria. Esto ha sido una lección, pero empezó con José Luis (Zapatero), la resolución del Congreso de 2016 y el Supremo dando la razón a una ley. Una lección a los que dicen que hay un estado represor: esto es una democracia sana que ha acabado con una gran contradicción, que el verdugo estuviera en el mismo espacio que sus víctimas. Con esto -advirtió- empezamos a saldar deudas", recordando que las cuentas tumbadas ya incluían 15 millones para exhumar a asesinados.

Cerró pidiendo "un último esfuerzo porque necesitamos ganar. Tenemos votar con el orgullo de un partido que cumple con Canarias y España, y con equipos e ideas para la segunda gran transformación del país en empleo, clima, educación, igualdad...". En su visión, la derecha tiene un concepto de España en el que "solo caben ellos y nosotros, una organización joven pero centenaria, en el que cabemos todos".

Elogios previos a Torres y Ábalos

Con intervenciones relámpagos porque el acto no debía tardar más de una hora (duró 75 minutos), los turnos "teloneros" los abrió el alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez, quien agradeció a Sánchez y Ábalos la firma del convenio de Las Chumberas cumpliendo "la promesa" que le hicieron "sin más estridencias" hace 4 meses. Le siguió Olivia Delgado, candidata al Senado, quien advirtió de que nada está cerrado, llamó a una movilización masiva, criticó que, por cuarta vez, Podemos votase en contra de Sánchez, avisando de que haya una quinta, y subrayando la constitución, horas antes y en el mismo escenario, de la Fundación Pedro Zerolo para recordar que los derechos "no solo se conquistan, sino que se defienden".

Héctor Gómez criticó a la derecha por despreciar la necesidad de estabilidad y se atrevió a pedir una mayoría absoluta después de repasar los logros de poder del PSOE canario tras el 26M. A su juicio, solo hay un proyecto realista y auguró que, en meses, estarán gobernando y "ayudando a Torres a superar los muchos obstáculos" con los que se ha topado. Frente a las críticas de Ana Oramas, le dijo a Ábalos que en Canarias "sí te queremos".

Pedro Martín ahondó en el reconocimiento a Ábalos y admitió que discute mucho con Torres, pero le alabó por ser un hombre "capaz y honrado". Por eso censuró que CC le haya intentado manchar en los tribunales. Sus palabras hicieron que los presentes se levantaran y le tributaran un largo aplauso al presidente.

Torres resaltó a Patricia Hernández por su "arrojo" al abrir los comedores escolares en verano y a Gutiérrez y Ábalos por Las Chumberas. Alertó de la "herencia envenenada" de CC y subrayó el presupuesto para 2020, "con 18 millones más para PCI, 20 para vivienda, 37,5 en empleo, 125 en educación, 137 en sanidad y 15 contra el cambio climático frente a cero de CC". A su vez, defendió los cambios consensuados con los municipios sobre el Fdcan y las subidas fiscales concretas, aparte de asegurar que CC estaba detrás de la denuncia de Bañolas ahora archivada, censurándole su "cobardía" y felicitando a todos por "haber acabado con el régimen".