Los pacientes con alta médica que ocupan camas en los hospitales de Canarias ascienden a 250, un 60% más que en octubre de 2015. El dato fue ofrecido ayer en el Parlamento por la consejera de Sanidad del Gobierno autonómico, Teresa Cruz Oval, quien anunció que su departamento elaborará un decreto para facilitar la derivación de estas personas a centros sociosanitarios. "Sanidad no va a dar la espalda al área social", aseguró Cruz Oval, en respuesta a una pregunta del diputado del PP Miguel Ángel Ponce, quien le había reclamado la puesta en marcha de un "plan de contingencia" dirigido a que estos pacientes -generalmente mayores con dolencias crónicas- puedan ser ingresados en instalaciones de carácter sociosanitario. Ponce pidió a la consejera "valentía política" para "cambiar el enfoque" de las políticas sanitarias. A juicio del parlamentario popular, el modelo actual "está obsoleto" y debe revisarse de forma "urgente" para centrarse en "el paciente crónico sanitario". Por su parte, la consejera de Derechos Sociales, Noemí Santana, concretó la flexibilización de los plazos del segundo Plan de Infraestructuras Sociosanitarias de Canarias que había adelantado hace unas semanas. Los cabildos tendrán un año más para crear las 5.500 plazas previstas en el documento, de modo que el 31 de octubre de 2020 deberán culminar la ejecución del convenio con el Ejecutivo.

El Gobierno regional está convencido de que tendrá "ingresos suficientes" para desarrollar en 2020 su agenda social. La llegada de las entregas a cuenta del sistema de financiación autonómica y la recuperación del medio punto rebajado este año al IGIC son algunas de las vías con las que el Ejecutivo prevé captar esos recursos, pero si no fuera suficiente se plantea adoptar más medidas fiscales encaminadas a que "los que tienen más paguen más", avanzó ayer el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, durante una sesión del Pleno del Parlamento.

El Gobierno baraja sumar una subida del tramo autonómico del impuesto sobre la renta para los ingresos superiores a 80.000 euros a las modificaciones del sistema tributario con las que pretende afrontar actuaciones como la renta de ciudadanía, el desarrollo de la Ley de Servicios Sociales o la lucha contra la crisis climática.

Torres se reafirmó en la intención del Gobierno de elevar medio punto, hasta el 7%, el tipo general del IGIC. "Si la bajada hubiera funcionado, no la tocaríamos", dijo el presidente a Vidina Espino, diputada de Ciudadanos (grupo mixto), que le había advertido de que la reducción de impuestos "no tiene ninguna justificación" en el actual contexto de desaceleración económica y le exigió una "auditoría" del gasto público para recortar el que resulte "superfluo".

Por su parte, el portavoz de CC-PNC, José Miguel Barragán, acusó a Torres de ocultar los aumentos de impuestos que recogerá el próximo presupuesto autonómico, pese a que ya han trascendido los del IGIC, los tributos sobre el tabaco y el juego y un "decalaje" del impuesto de sucesiones y donaciones. El jefe del Ejecutivo le replicó que se tomarán "los ajustes precisos para corregir los errores y las malas previsiones de CC", entre las que incidió en una previsión de recaudación del impuesto indirecto 193 millones inferior a la contemplada en las cuentas de 2019 -1.544 millones de euros frente a 1.737- , a pesar de que el importe ingresado en lo que va de año es el segundo más elevado de la historia.

También en relación con los planes fiscales del Gobierno, el vicepresidente y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, adelantó la aplicación de medidas destinadas a "perseguir el fraude", lo que constituye, a su juicio, "la mejor de las políticas fiscales". "Haremos un gran esfuerzo para modernizar la Agencia Tributaria Canaria con el objetivo de que todo el mundo pague", anunció Rodríguez, en respuesta a una pregunta formulada por el diputado del PP Manuel Domínguez.

Según el parlamentario popular, el actual es "un momento de riesgo" para subir impuestos. "Su política es quitar el dinero del bolsillo de los ciudadanos para devolvérselo en forma de ayuda", afirmó Domínguez.

La cifra de crónicos en hospitales crece un 60%