Sebastián Franquis permanecía al cierre de esta edición en la Unidad de Medicina Intensiva (UMI) del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, en Santa Cruz de Tenerife, tras sufrir un infarto después de su intervención en el pleno del Parlamento de Canarias. El consejero de Obras Públicas, Transportes y Vivienda del Ejecutivo regional, que compareció en la Cámara autonómica para debatir sobre la construcción del puerto de Fonsalía, al sur de Tenerife, se sentía mal desde el martes, un malestar que se agravó momentos después de dejar la tribuna del hemiciclo y que lo obligó a abandonar prematuramente el pleno para acudir a un centro de salud.

El dirigente socialista, de 57 años de edad, intervino durante 44 minutos en el debate parlamentario. Alrededor de media hora después de finalizar se dirigió al centro de salud más próximo a la sede de la primera institución de las Islas. En el consultorio de la calle Ruiz de Padrón, ubicada en uno de los laterales de la plaza del Príncipe de la capital tinerfeña -a apenas unos minutos del Parlamento-, Franquis recibió atención inmediata y, tras ser sometido a las pruebas pertinentes, fue trasladado al hospital de la Candelaria en una ambulancia medicalizada. El consejero fue hasta el centro de salud por su propio pie y estuvo plenamente consciente en todo momento, también a su llegada a la unidad de hemodinámica del hospital universitario.

El responsable de las áreas de Obras Públicas, Transportes y Vivienda fue sometido a una operación quirúrgica después de que los facultativos diagnosticaran que la causa del infarto estaba en una arteria. Una "pequeña intervención", tal como explicaron fuentes del Gobierno de Canarias, que resultó satisfactoria y que ya en la misma tarde de ayer dio tranquilidad a sus familiares y compañeros.

De hecho, Franquis incluso pudo conversar con quienes fueron a visitarlo al hospital, entre ellos el también socialista Ángel Víctor Torres. El presidente del Ejecutivo regional dejó un mensaje en la red social Twitter con el que tranquilizó definitivamente a los compañeros de Gobierno, correligionarios y vecinos de escaño de Sebastián Franquis. "Volverá a ser el magnífico gestor y el insustituible compañero socialista que es. Canarias te manda un abrazo", escribió Torres.

El jefe del Gobierno autonómico explicó que el consejero está "fuerte" y transmitió las buenas noticias que llegaban desde el hospital tras el "tremendo susto" de la mañana. Otros representantes del Ejecutivo, como el vicepresidente Román Rodríguez, también trasladaron sus buenos deseos y su apoyo tanto a su compañero de Gabinete como a sus familiares.

Susto de los diputados

El susto que se llevaron los diputados fue tal que obligó a suspender la sesión plenaria cuando intervenía el consejero de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial, José Antonio Valbuena. La decisión la tomó el presidente de la Cámara, Gustavo Matos, tras consultar a los portavoces de los grupos parlamentarios.

Al cierre de esta edición, Franquis, uno de los rostros más reconocibles del socialismo canario en los últimos años, continuaba bajo vigilancia hospitalaria. Aunque su evolución es favorable, está por ver la duración del obligado período de inactividad y quién le sustituirá momentáneamente en sus funciones al frente de la Consejería de Obras Públicas. Ayer, aún con el susto en el cuerpo, en el Gobierno no habían decidido quién tomará el relevo temporal de Franquis en el departamento, si bien el trabajo de los viceconsejeros, directores generales y funcionarios garantiza que no haya mayor incidencia en el día a día.

Antes de ocupar por primera vez una consejería en el Gobierno canario, Franquis ocupó los cargos de concejal en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y diputado en el Congreso de los Diputados, amén de desenvolverse también en distintos cargos orgánicos del Partido Socialista.