El Gobierno de Canarias, a través de la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial, ha incoado este lunes el expediente de investigación para determinar las causas del cero energético que se produjo el pasado domingo en la isla de Tenerife y que dejó sin suministro a más de 450.000 clientes, lo que equivale a cerca de un millón de personas afectadas.

Así lo ha anunciado en declaraciones a los medios el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, un día después de que el director de Operación de Red Eléctrica de España (REE) en Canarias, Eduardo Prieto, haya ofrecido una rueda de prensa en la que apuntó a un fallo fortuito del transformador de tensión de la subestación de Granadilla de Abona como posible origen del apagón que se inició pasada la una de la tarde y se prolongó hasta después de las diez de la noche.

Ángel Víctor Torres indicó que en el día de ayer se incoó el expediente de investigación y los técnicos de la Consejería de Transición Ecológica ya están hoy martes analizando el lugar donde se produjo el corte de suministro eléctrico. Añadió que el objetivo del Gobierno es que esta investigación sea "rápida" y concluya con cuáles han sido las causas del apagón, por qué ha afectado a toda una isla y las consecuencias que

tienen que asumir los responsables.

En este sentido, Torres quiso recordar que hay sanciones económicas por este tipo de incidentes que pueden ir de los 600.000 a los 60 millones de euros y dejó claro que hay daños económicos importantes que se han producido en la isla de Tenerife por un apagón inesperado. "Los responsables tendrán que salir a la luz pronto y cuando eso ocurra tendrán que asumir los daños que se han provocado", afirmó.

El jefe del Ejecutivo canario señaló, también, que éste no es el primer cero energético que se produce en las islas, por lo que "hay causas que tenemos que saber con transparencia, con claridad y consecuencias".