La noticia saltaba el pasado día 6 y fue celebrada por todo lo alto por muchos canarios en las redes sociales. El consejero de Cultura y Patrimonio Histórico y portavoz de Podemos en el Cabildo de Fuerteventura, Andrés Briansó, anunciaba que la institución majorera descartaba el proyecto del escultor vasco Eduardo Chillida -ya fallecido- en Tindaya para defender los valores naturales de esta montaña sagrada. Sin embargo, solo un día después, el anuncio generó fuertes divisiones en el seno del gobierno insular, liderado por la coalición PSOE, y Unidas Podemos. ¿La razón? Briansó había dado su visión particular sin contar con sus socios, que no parecen por la labor de prescindir del proyecto, de tal manera que queda en el aire.
El grupo de gobierno del Cabildo de Fuerteventura ha evitado con posterioridad pronunciarse sobre la renuncia al proyecto de Chillida anunciada por Briansó, para no incomodar a Podemos, formación que sustenta el gobierno insular con dos consejeros. Sin embargo, dejan claro que no existe ninguna fracción o crisis en el gobierno insular. Para el equipo tripartito liderado por el presidente Blas Acosta, las prioridades de la Isla en estos momentos son otras, como "la sanidad, el agua , empleo, infraestructuras básicas, entre otras, y en ellas son en las que se está trabajando con absoluta prioridad a otros temas".
La institución insular emitió un comunicado en el que se señala que el pacto de PSOE, NC/AMF y Unidas Podemos establece en su punto 61 "la puesta en valor del Poblado de la Atalayita y del Monumento Natural Montaña de Tindaya como centro de la historia de nuestros antepasados y como referente arqueológico de Canarias". Sin embargo, la declaración institucional evita cualquier alusión a las declaraciones del consejero de Podemos, que han sido rechazadas por la patronal turística de Fuerteventura al considerar que el proyecto en la Montaña de Tindaya supone una iniciativa estratégica para el turismo de la Isla. Sin embargo, han sido aplaudidas por los diferentes grupos ecologistas.
Además, el Ayuntamiento de La Oliva ha mostrado su apoyo al plan Chillida. A las tesis del Consistorio norteño se ha sumado la Asociación de Empresarios del Turismo de Fuerteventura (Excelfuert), la otra patronal majorera, que ha mostrado su apoyo al proyecto escultórico al considerar que su ejecución y puesta en práctica supondrá "un antes y un después en la oferta turística majorera".
El grupo de Gobierno en el Ayuntamiento de La Oliva, formado por CC, Gana y NC, entiende que las decisiones sobre el proyecto de Chillida se tienen que adoptar, primero, en las instituciones, segundo, contando con la opinión de la gente, tercero, ofreciendo información de manera clara y transparente, y cuarto, comenzando por asegurar la protección, conservación y restauración de la montaña.
