Marruecos celebró el pasado 30 de julio el vigésimo aniversario de la Exaltación al Trono del Rey Mohamed VI, un monarca que durante este tiempo ha aportado "progreso y modernidad" al país, sostiene Ahmed Moussa, cónsul general de Marruecos en Canarias. El diplomático marroquí subraya el progreso que su país ha vivido en materia de igualdad de género y en lo referente al uso de energías renovables. Moussa denuncia los radicalismos y el terrorismo ahora más presente en África y entre los retos del país, el cónsul destaca "la reforma del sistema educativo" y "la creación de empleo para los más jóvenes".

El 30 de julio se conmemoró los 20 años de la entronización de Mohamed VI, un cifra especial. ¿Tuvo este año la celebración algún significado diferente para la comunidad marroquí?

El 30 de julio el pueblo marroquí en su conjunto celebró con júbilo el vigésimo aniversario de la entronización de su majestad el rey Mohamed VI. Es la celebración de la simbiosis de lealtad entre la monarquía y el pueblo. Una tradición muy antigua. El monarca recibió ese mismo día, en una gran recepción, al Gobierno e invitados representantes de los sectores de la sociedad, así como al cuerpo diplomático acreditado en Rabat. El día 31 el Gobierno, el Parlamento y los representantes de las regiones y provincias marroquíes presentaron la lealtad a la monarquía y a la constitución en el Palacio Real.

¿Qué características tiene Mohamed VI cómo rey? ¿Qué balance hace del papel desempeñado por él en estos años de reinado?

Es un rey muy querido. Ha aportado progreso y modernidad. Ha situado a su país como el más estable en África y como una de las democracias mejor consolidadas en el mundo árabe y en el continente africano. Si tuviera que definir en pocas palabras el balance de estos 20 primeros años hablaría de progreso, modernidad, estabilidad y seguridad. El monarca es muy popular y muy querido por el pueblo marroquí, entre otras cosas por las numerosas reformas llevadas a cabo en el país desde su llegada al trono. Ha transformado el país.

En relación a las transformaciones, ¿cómo ha evolucionado la igualdad de género en el país?

Afortunadamente le puedo dar una buena noticia. A partir del nuevo Código de Familia de 2004 y la nueva constitución aprobada en 2011 ha habido una gran reforma que tiende a la promoción de la situación de la mujer en Marruecos. La mujer es igual en la constitución, en nuestro arsenal jurídico ya hay igualdad de género. Hoy en día podemos estar orgullosos de los logros alcanzados, aunque somos conscientes de que el camino a recorrer en esta cuestión es largo.

¿Y el crecimiento de las energías renovables?

Nosotros hemos tenido la suerte de acoger la Conferencia Mundial del Cambio Climático organizada por Naciones Unidas. Fue un éxito. La visión real y la del Gobierno marroquí es la apuesta a medio y largo plazo por las energías limpias. De hecho tenemos la mayor central del mundo de energía fotovoltaica y los mayores parques de energía eólica en África. Aspiramos a que en l 2030 podamos cubrir el 40% de nuestras necesidades energéticas a través de las energías renovables. La tendencia es esa. Promocionar las energías limpias. Es una apuesta irreversible.

¿Cuáles son los principales retos de Marruecos?

Marruecos es un país que ha liberalizado su economía para dar una gran impulsión al desarrollo económico y social. Y este es uno de los principales retos, ya que el desarrollo económico conlleva la consolidación del desarrollo político, de la educación y de la situación social. La reforma del sistema de educación es el siguiente reto que tenemos, se está llevando a cabo y está en la buena vía. La creación de empleo y la formación para los jóvenes es otro de los retos.

Ha habido un incremento de la presencia de grupos terroristas en la zona del Sahel ¿Pone esta situación en peligro la seguridad o la economía del país?

Marruecos es un modelo de estabilidad y seguridad en África y en el mundo árabe. La mejor garantía para fomentar la libertad y los derechos humanos es establecer mecanismos de seguridad eficaces basados en un enfoque global, en el marco de la legalidad constitucional. Esto es una política que viene del rey anterior y que nos ha dado buenos resultados. El verdadero islam es paz, tolerancia, cohabitación y amor a la humanidad. Si no se ama a la humanidad no hay islam. Todos esos radicalismos no los consideramos islam, lo consideramos un pensamiento radical que desemboca en algo que es odioso: el terrorismo. Nosotros lo condenamos, estamos en el Comité Antiterrorista de Naciones Unidas y cooperamos con Europa.

La justicia marroquí se ha mostrado implacable contra los tres principales acusados que degollaron a dos turistas nórdicas en diciembre. ¿Está de acuerdo con las penas de muerte que se les ha impuesto?

La justicia es independiente en Marruecos. Somos un Estado de derecho. El poder judicial es un poder autónomo. El tribunal marroquí ha aplicado la ley en vigor en Marruecos contra los autores materiales de ese crimen odioso que toda la sociedad marroquí y la comunidad internacional han condenado. Yo felicito a nuestras fuerzas de seguridad por la actuación ejemplar para lograr detener a los autores de estos delitos en un tiempo récord.

La inmigración es otro de los temas de actualidad en el país. ¿Está siendo Marruecos una pieza clave en el control de la inmigración en España?

Marruecos, desde hace una década, es un aliado estratégico de España, no solo en la lucha contra la inmigración irregular sino también en la lucha contra el terrorismo y todo tipo de tráficos ilícitos. Estamos luchando contra las mafias de tráfico de personas pero cuando se controla la parte oriental del Mediterráneo, se desvían hacia la parte occidental. Marruecos y España van de la mano, nuestras fuerzas de seguridad y nuestros servicios están luchando contra este fenómeno de forma eficaz.

Los últimos meses la inmigración ilegal en España ha disminuido, pero de los que llegan la mayoría son de origen marroquí. ¿A qué atribuye esta situación?

La inmigración es un fenómeno que existe de toda la vida. En Marruecos abogamos por las migraciones seguras, ordenadas y regulares. Las mafias de tráfico de personas fomentan el fenómeno de inmigración irregular engañando y prometiendo empleos ficticios en contrapartida de partidas lucrativas. Marruecos es también un país receptor de migrantes. Pero hay un fenómeno de llamada que dice que en Europa se pagan mejores salarios y se vive mejor, y hay personas que arriesgan su economía y su vida para llegar. En Marruecos también tenemos un acuerdo de repatriación de este tipo de personas, por lo que su viaje es en balde. Una vez que son localizados las autoridades españolas las devuelven y se dan cuenta de que las mafias los han engañado.

La actividad turística aporta más del 11% del PIB nacional de Marruecos. ¿Es el país un competidor turístico para las Islas?

No somos competidores de Canarias. Marruecos ha apostado por la complementariedad con sus socios europeos. Apostamos por el desarrollo del turismo cultural, gastronómico y el exótico como en Marrakech, Fes Meknes, Rabat y las regiones turísticas del desierto. El destino más buscado en Marruecos es Marrakech y no tenemos playa. El turismo de sol y playa está dirigido mayoritariamente a los turistas nacionales marroquíes y a los países árabes de Oriente. Por eso no he visto yo competitividad. A mí no me preocupa. Canarias es una potencia, recibe 16 millones de turistas, nosotros en todo Marruecos recibimos 10 millones y la gran mayoría es cultural. Apostar por otro tipo de turismo sería un error, hay que ser inteligentes.