Los partidos que respaldan el pacto progresista que formará el próximo Gobierno de Canarias ultiman las bases del programa que presentan hoy, perfilan el reparto de tareas y la composición de la Mesa del Parlamento, que se constituye el martes. La duda despejada ya es que el PSOE presidirá la Cámara como ha ocurrido en estos últimos cuatro años de la mano de Carolina Darias. En esta ocasión la preferencia es que la presidencia siga recayendo en una mujer pero esta vez de Tenerife por el equilibrio insular, ya que el presidente del Gobierno será en esta ocasión de Gran Canaria. Las diputadas socialistas que más suenan a día de hoy son Teresa Cruz y Nira Fierro ya que las otras dos diputadas son Patricia Hernández, que ahora es alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife, y Yolanda Mendoza, que se estrena en las lides parlamentarias.

Teresa Cruz es diplomada en Trabajo Social, experta en Intervención Familiar y Menores. Procede del municipio de Granadilla, en el sur de Tenerife, zona donde el partido tiene su principal fuerza en la isla. Fue concejala y consejera del Cabildo de Tenerife. Entró en el Parlamento de la mano de Patricia Hernández en 2015 cuando era candidata a la Presidencia y también apostó por la exvicepresidenta en las primarias que finalmente ganó Ángel Víctor Torres.

Fuentes socialistas dan por hecho que Nira Fierro entrará en el Gobierno de Torres. El secretario general la designó vicesecretaria de Acción Política de la Ejecutiva regional y fue cabeza de lista al Parlamento por Tenerife. Si no accede a la Mesa de la Cámara, sí tendrá un puesto relevante en el Ejecutivo.

En el caso de que el PSOE designe un hombre, el nombre que más suena es el de Gustavo Matos, jurista. El lagunero también es uno de los principales apoyos de Torres en Tenerife y le premiará a buen seguro con un puesto relevante en el Parlamento o en el Gobierno. Además de la Mesa, algunas fuentes apuntan que podría ser portavoz en la Cámara de su partido o consejero en el futuro Ejecutivo.

El nuevo reglamento del Parlamento, publicado el pasado mes de mayo, establece que los cinco miembros que forman el órgano de gobierno de la Cámara autonómica serán elegidos entre los grupos mayoritarios y con presencia equilibrada entre hombres y mujeres. En teoría el reparto estaría entre dos puestos para el PSOE, otros dos para CC y no para el PP como en esta legislatura que termina. Esta composición se realizó en 2015 en base al acuerdo de gobierno de ese momento que fue CC-PSOE.

El problema puede surgir en que esta distribución dejaría en minoría en la Mesa a los socialistas frente a nacionalistas y populares, que en esta legislatura se quedan en la oposición. Por ello se baraja la opción de dejar a CC con un solo miembro y que entre un parlamentario de Nueva Canarias (NC) para que el pacto tenga mayoría en la Mesa. Una decisión de los partidos firmantes del pacto que jurídicamente sería recurrible por CC, segundo grupo de la Cámara con 20 diputados y tiene derecho a contar con dos miembros.