La ejecutiva que vivió el PSOE canario en la tarde del lunes en el santacrucero Hotel Escuela no solo abordó los resultados de la constitución de los ayuntamientos tras los pactos previos, sino dos indisciplinas de concejales que pueden ser claves para que el futuro Gobierno regional tenga corte progresista.

El secretario general y candidato a la Presidencia, Ángel Víctor Torres, anunció la apertura de expediente de expulsión a los dos ediles de Valle Gran Rey por incumplir su orden de no perjudicar a ASG y a 3 de los 5 (los otros 2 son independientes) de Tacoronte por no hacer alcaldesa a Virginia Bacallado (Cs), que venció en las urnas.

Sin embargo, en el tramo en el que se trataron ambos casos una parte de la dirección recalcó que se debe diferenciar lo ocurrido en uno y otro lugar al apreciar grandes diferencias.

Para este sector, lo de Valle Gran Rey sí es muy grave y hay que arreglarlo porque puede perjudicar al máximo un pacto regional por haber contrariado a ASG.

Por el contrario, se considera que en Tacoronte existen muchos matices que deben graduar a la baja la indisciplina, algo que comparte el propio Torres, según reconoce a El Día.

Entre los argumentos que esgrimen destaca el hecho de que el PSOE de Carlos Medina, que permaneció fiel al partido en los últimos mandatos, cogobierna ahora con NC, partido al que los socialistas pretenden sumar al pacto de progreso.

Asimismo, Ángel Víctor Torres matiza que la intención era gobernar también con NC, pero el sector que introdujo las apreciaciones sacó enseguida las acusaciones que están vertiendo desde el sábado dirigentes regionales e insulares de Cs sobre Patricia Hernández en Santa cruz, acusándola de comprar a los 2 ediles de Cs y propiciar un tamayazo, algo que no solo niegan con rotundidad, sino que creen digno de querella.