PP y Ciudadanos (Cs) acordaron ayer ir de la mano en todas las instituciones donde sumen para formar gobierno y, en el caso del Ejecutivo de Canarias, explorar como "primera opción" un acuerdo de "cambio" con el PSOE en donde los nacionalistas se queden fuera tras 26 años en el poder regional, aunque una y otra formación admiten que es complicado. No obstante, la secretaria general de los populares, Australia Navarro, precisó que este acuerdo no supone que se abandone la posibilidad de mantener una alianza con Coalición Canaria (CC) en el Gobierno autónomo que requeriría el apoyo también de la Agrupación Socialista Gomera. Navarro destacó que el PP no tiene "líneas rojas" y que lo que está explorando es un pacto programático que mejore todos los indicadores negativos que tiene Canarias.

Entre las instituciones que están en juego, además del Gobierno regional, están los ayuntamientos de Santa Cruz de Tenerife y el Cabildo tinerfeño, donde ambas formaciones de centro derecha pueden pactar para gobernar tanto con los socialistas como con los nacionalistas, al igual que en el Ayuntamiento de Santa Brígida, el Cabildo de Gran Canaria -corporación en la que con el PSOE podrían dejar fuera de la Presidencia a Antonio Morales (NC)- y Tacoronte, único ayuntamiento que regiría Ciudadanos.

Navarro resaltó que ambos partidos irán de la mano porque los dos son "formaciones liberales" y coinciden en muchos principios e, incluso, en cuestiones programáticas. "Hemos acordado tenerlos como socios preferentes, lo que significa que vamos a explorar juntos los posibles acuerdos que nos lleven a establecer un Gobierno de Canarias estable y, por supuesto, esa relación también la pondremos de manifiesto una vez que el Parlamento esté en funcionamiento", aseveró .

Ayer fue un día de intensas reuniones marcadas por las alianzas que se van conociendo, como la anunciada por el PP y el PSOE en el Cabildo de Lanzarote y en el Ayuntamiento de Arrecife que deja fuera a los nacionalistas o en el Ayuntamiento de Telde, donde perdería la alcaldía NC que podría tener consecuencias en ese pacto de progreso en el Gobierno que exploran los socialistas con Nueva Canarias, Podemos, la Agrupación Socialista Gomera o Cs.

Por la mañana se reunió la comisión negociadora del PSOE con Ciudadanos y después con el PP y por la tarde los populares con la formación de Albert Rivera, que optaron finalmente por convertirse en "socios preferentes" y sentarse a negociar con los demás como si fueran un solo partido.

La candidata de Cs a la Presidencia, Vidina Espino, al ser cuestionada sobre si su formación reconsideraría la opción de CC si Fernando Clavijo no es el candidato a la Presidencia, al estar investigado por el caso Grúas, respondió que la primera apuesta es un acuerdo con el PSOE, pero están "abiertas y sin cerrar" las puertas a otras alianzas.

Espino recordó que es cierto que pesa una denuncia sobre Ángel Víctor Torres, candidato del PSOE canario y que aspira a desbancar a CC de la Presidencia, pero Cs considera en estos momentos "prematuro" pronunciarse sobre ese caso. En el decálogo de Ciudadanos se expone que no respaldarán a cualquier cargo público que esté investigado.

Tras el encuentro de Ciudadanos con el PSOE, el portavoz socialista, Sebastián Franquis, destacó que existe "plena coincidencia" con las propuestas sociales de la formación de Albert Rivera, quien ya ha dado instrucciones desde Madrid para que haya acercamientos entre ambas fuerzas. Con todo, Espino insistió en que mantiene el mantiene el veto a apoyar a un gobierno regional del que forme parte Podemos.

Los socialistas sumarían con la organización de Pablo Iglesias y Nueva Canarias 34 escaños, por lo que le harían falta los tres de ASG, con los que tendrían uno más que la mayoría necesaria para investir al socialista Ángel Víctor Torres. Ciudadanos cuenta con dos diputados, lo que también hace su apoyo decisivo.

Uno de los escollos que separa a ambas formaciones es, por tanto, esa alianza con Podemos así como las rebajas fiscales que propone Ciudadanos. Franquis insistió en que su partido se ha comprometido a estudiar las deducciones fiscales que plantea el partido naranja en el tramo canario del IRPF, si bien los socialistas no aprobarán ninguna bajada del IGIC. En cuanto a la formación morada podría quedarse fuera del gobierno pero dar su respaldo al PSOE.

Ciudadanos planteó a los socialistas el decálogo programático aprobado por la Ejecutiva nacional de su partido. En ese documento, Cs insiste en la necesidad de promover la regeneración democrática, realizar auditorías internas para eliminar las duplicidades y los gastos prescindibles y mejorar la gestión de los servicios esenciales. Aunque los apoyos al PSOE no están claros, esta formación reconoció que "ha habido un acercamiento de posturas" en torno a un potencial programa.