Sus soldados se embarcaron en la Armada Invencible, hicieron historia en Rocroy, se batieron por media Europa y hasta libraron la Guerra de Cuba. Es el Regimiento Soria 9, el más antiguo de Europa, tiempo atrás conocido como los Tercios de Nápoles, y está a punto de estrenarse en Irak.

El Ejército de Tierra ultima estas semanas en los campos de maniobras de El Matorral y Pájara, ambos situados en Fuerteventura, la instrucción del medio millar de militares de la Brigada Canarias XVI que a partir de mayo se van a hacer cargo de dos de las misiones internacionales en las que participa España, las de Irak y Mali.

La brigada del Ejército de Tierra con base en Canarias completó hace meses el periodo de descanso que le correspondía en las rotaciones que marcan los relevos en las misiones en el extranjero tras haber dirigido durante seis meses, en 2017, al contingente de cascos azules de Naciones Unidas que vela por la paz en el Líbano.

En mayo, sus unidades van a ser activadas de nuevo para regresar a un escenario que ya conocen, el de la crisis del Sahel, en Mali, donde estuvieron en 2015 bajo mandato de la Unión Europea, y participarán por primera vez en un despliegue en Irak, en este caso como parte de la coalición internacional que adiestra a las Fuerzas Armadas de ese país a petición del Gobierno de Bagdad.

La Canarias XVI tiene un largo historial en misiones de paz, que arranca a finales de los noventa en Bosnia-Herzegovina y Kosovo (Unprofor, de la ONU, y Sfor y Kfor, de la OTAN), sigue en cuatro rotaciones en Afganistán (Aspfor, de la OTAN) y más recientemente se prolonga en Mali (EUTM, de la UE) y Líbano (Unifil, de la ONU), pero nunca había sido destacada a Irak. En dos meses, dará el relevo a la Brigada de Córdoba en la base Gran Capitán, a 30 km de Bagdad. Su cometido será el de entrenar a las unidades del Ejército iraquí que siguen combatiendo contra el grupo yihadista Daesh, en una guerra que el Gobierno de Bagdad ha dado por terminada, pero en la que se siguen produciendo ataques de la insurgencia.