El consejo de administración de CaixaBank ha acordado un cambio en su política de dividendos para el ejercicio 2019 conforme a la cual la remuneración al accionista se realizará mediante el pago de un único dividendo en efectivo, en lugar de dos como hasta ahora, que se abonará una vez concluya el año, en torno al mes de abril.

Así lo ha indicado el banco en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) después de anunciar unas ganancias de 1.985 millones de euros en 2018, un 17,8% superior, gracias a la mejora de todos los márgenes, la mayor aportación de BPI y la reducción de dotaciones.

A pesar de esto, la entidad presidida por Jordi Gual ha reiterado su intención de remunerar a sus accionistas distribuyendo un importe en efectivo superior al de ejercicios anteriores, fijando el importe máximo a distribuir con cargo al ejercicio 2019 en el 60% del beneficio neto consolidado.

Asimismo, CaixaBank ha decidido proponer a la junta general ordinaria de accionistas, que se convocará durante el próximo mes de febrero, la distribución de un dividendo complementario en efectivo de 0,10 euros brutos por acción, con cargo a los beneficios de 2018 a abonar durante el próximo mes de abril.

Una vez satisfecho este dividendo, el importe total de la remuneración al accionista correspondiente 2018 habrá sido de 0,17 euros brutos por acción, siendo el importe total abonado equivalente al 51% del beneficio neto consolidado, en línea con elPlan Estratégico 2015-2018.

No obstante, la aprobación de este dividendo por la junta, en su caso, así como las condiciones específicas del pago, se comunicarán oportunamente mediante hecho relevante al supervisor, tal y como ha subrayado la entidad.

En tanto no concurran circunstancias económicas, financieras, de negocio, regulatorias o recomendaciones del supervisor prudencial o de cualquier otro tipo que justifiquen la modificación de esta política, el banco está comprometido a destinar más del cincuenta 50% de su resultado neto consolidado a la remuneración en efectivo.

El consejo, al inicio de cada año y al tiempo de hacer público el resultado del ejercicio anterior, puede especificar un rango estableciendo un máximo de dividendo en efectivo esperado, siempre por encima del mínimo del 50%.