La portavoz de Greenpeace y experta en Biología Ambiental, Pilar Marcos, ha asegurado hoy que Canarias lidera el porcentaje de degradación y destrucción de superficie costera en España.

"El archipiélago se incorporó tarde al ladrillo, pero a toda máquina en la destrucción de sus costas y ha multiplicado por cuatro la destrucción de su suelo en los últimos 30 años", afirma la experta en una entrevista a la Agencia Efe.

En 30 años, Canarias ha incrementado su superficie urbanizada en un 130 por ciento, una cifra visiblemente superior a la media española, que alcanza el 105 por ciento.

Casi un 12 por ciento de la superficie costera canaria está degradada, explica Marcos, y debido principalmente a la construcción (8,7 por ciento), y a los grandes incendios forestales (3,2).

La portavoz alerta sobre el posible "renacimiento" del ladrillo, y recuerda que los visados para viviendas de obra están actualmente a los mismos niveles que durante la burbuja inmobiliaria de 2007 y 2008.

"Tenemos una costa saturada de viviendas y unos ecosistemas destruidos al 80 por ciento en los 10 primeros kilómetros de costa, parece que lo único que sabemos hacer en este país es construir", critica Marcos.

La activista precisa además que un sistema costero sano contribuye a reducir los impactos del cambio climático, "es una defensa natural frente a los horizontes de cambio climático, como la subida del nivel del mar producida por el deshielo de los casquetes polares", apunta.

En Canarias los bosques de sebadales y los cordones dunares son formas naturales de autoprotección de los litorales, "si construimos en las lindes del mar y destruimos esas defensas naturales ponemos en peligro vidas humanas", asevera.

Para Marcos la solución no está en crear nuevas normativas, sino en aplicar las leyes ambientales que actualmente existen.

"Si existe una ley que dice que no se puede construir en los 100 primeros metros de costa debemos respetarla y no inventar subterfugios, como se ha hecho en Canarias con la Ley del suelo y con la Ley para descatalogar espacios naturales, para seguir construyendo", agrega.

La portavoz considera necesario renovar el paquete hotelero de las islas y pide tolerancia cero con las zonas sin construir, pues son el único "pulmón" libre que permitirá el desarrollo económico y sostenible del archipiélago en el futuro.

En relación a los 394 puntos de vertidos que existen en las islas, 277 de ellos no autorizados, la experta considera contradictorio que Canarias, que vive del Turismo, no se preocupe por mejorar la gestión de sus aguas residuales.

"Estamos matando a la gallina de los huevos de oro, y no lo decimos desde Greenpeace, el propio sector turístico ya habla de un modelo de negocio obsoleto y que debe poner en valor el medioambiente", explica.

La bióloga alerta de que muchos municipios son incapaces de gestionar sus aguas residuales, lo que redunda en la calidad de las aguas de baño de las islas y en las multas "que estamos pagando todos los españoles", añade.

A la hiperurbanización y al vertido de residuos hay que sumar el problema de los plásticos y microplásticos, continúa la experta, que ya se están incorporando a las cadenas tróficas y al sistema digestivo de los seres humanos.

"Nos hemos convertido en adictos al plástico, desde la bolsa de papas fritas que olvidamos en la playa y que arrastra la mar, hasta la ausencia de una gestión real de residuos por parte de muchos ayuntamientos", afirma.

Es una problema real, y es un problema grave, pero para Marcos tiene "fácil" solución.

La portavoz recuerda que forma parte de nuestra responsabilidad ciudadana empezar a rechazar las bolsas de plástico en los supermercados y los hiperembalajes.

Asimismo, hace hincapié en la necesidad de que se creen políticas conjuntas y respetuosas con el medioambiente que permitan eliminar los plásticos de un solo uso en todo el mundo.

"En Etiopía se han eliminado las bolsas de plástico y nosotros tenemos que hacer igual, podemos construir hasta el infinito y también podemos acabar con el último kilómetro de costa virgen, pero el futuro pasa por salvaguardar el medioambiente", sentencia.