El exsenador, diputado regional canario y presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, manifestó hoy tras conocer la conclusión del sumario sobre su incidente con tres policías nacionales en Madrid hace seis años que está muy tranquilo porque se trata de un asunto menor que "se ha magnificado" y asume "con rigor" las consecuencias.

En la instrucción, el magistrado del Tribunal Supremo Luciano Varela aprecia indicios de un posible delito de resistencia grave a la autoridad en concurso con una falta de lesiones, por lo que emplaza a las partes a que se pronuncien sobre la apertura de juicio oral contra el entonces senador del PSOE y ahora presidente de la Agrupación Socialista Gomera (ASG).

"Es un tema menor, no sé si finalmente habrá juicio o no, seguramente puede ser hasta una falta, en cualquier caso asumo con responsabilidad las consecuencias y no tengo ningún tipo de pesar ni ningún tipo de inquietud, al contrario, tranquilidad y creo plenamente en la justicia", declaró Curbelo a los periodistas.

Apuntó que el asunto "se ha magnificado en exceso durante mucho tiempo" y aseguró que se alegra de que se vaya a adoptar un pronunciamiento definitivo en el ámbito del Tribunal Supremo, "que es una garantía para la aplicación del derecho".

Subrayó que está "absolutamente tranquilo" y que "los ciudadanos tienen que tener la convicción" de que hizo en su momento "lo que tenía que hacer".

De modo que el caso "se resolverá consecuentemente sin ningún problema" y "no tendrá más incidencias que las que realmente son, y son meramente menores", opinó.

"Yo creía sinceramente que volvería a ser citado para ampliar las aportaciones de prueba, pero si el instructor concluye que no es necesario lo acato plenamente", indicó Casimiro Curbelo.

La causa contra el exsenador se abrió tras un incidente en la madrugada del 14 de julio de 2011 en Madrid, cuando el presidente del Cabildo de La Gomera se quejó a unos policías del trato que su hijo, él y una tercera persona acababan de recibir en un establecimiento del que habían sido expulsados.

Según los indicios recabados en la instrucción, cuando los policías le explicaron los pasos que debía seguir para presentar una denuncia, el hijo de Casimiro Curbelo insultó y empujó a un policía, por lo que fue detenido.

Curbelo llamó entonces terroristas y borrachos a los agentes, les avisó de que era senador y les amenazó con acabar con sus carreras y con denunciarlos por detención ilegal.

Tras este incidente, el PSOE decidió no volver a presentar a Curbelo en las elecciones de 2015 al Cabildo de La Gomera, pero Curbelo concurrió con su partido ASG, repitió mayoría absoluta en la corporación insular y obtuvo tres de los cuatro escaños que corresponden a esa isla en el Parlamento de Canarias.