Dejar a nuestras mascotas solas en casa implica asumir una serie de responsabilidades, y la dueña de un perro ha aprendido una valiosa lección sobre lo importante que es adoptar todas las medidas de seguridad y precaución posible porque si no podemos poner en riesgo la salud de nuestro animal de compañía.

Una mujer regresó a su casa y encontró una botella de Baileys vacía en el suelo del salón y, para su sorpresa, a otra botella de alcohol le faltaba casi la mitad de su contenido. El culpable de este inusual incidente resultó ser su propio perro, que había ingerido el contenido de ambas botellas porque su dueña las había dejado a su alcance y, seguramente, sin ponerles la tapa.

La joven, desconcertada y preocupada por el estado de su mascota, grabó un vídeo de su perro llamado Jack mientras intentaba caminar, pero sin tener equilibrio lo que evidenciaba claramente que estaba bajo los efectos de la embriaguez. En la filmación, la mujer, con tono de incredulidad, compartió la escena en las redes sociales -en principio para buscar ayuda- sobre cómo abordar la situación. Lo más logico quizás habría sido salir corriendo para el veterinario en lugar de ponerse a grabar un vídeo preguntando a la gente qué hacer en esta situación.

Las reacciones de los usuarios en X (antes Twitter) fueron de todo tipo. Algunos encontraron la situación cómica, mientras que otros mostraron su preocupación por el estado de salud del perro. Uno de esos usuarios recomendó llamar de inmediato a un veterinario y destacó la seriedad del problema a la vez que recordó que el metabolismo de los perros es diferente al de los humanos, y el alcohol puede ser un veneno para ellos.

Los entornos en los que se encuentran animales domésticos deben estar libres de sustancias peligrosas tales como alcohol, medicamentos y productos de limpieza, que deben almacenarse de manera segura y fuera del alcance de las mascotas para evitar situaciones potencialmente dañinas. En casos de ingestión accidental, es fundamental buscar asistencia veterinaria de inmediato, ya que algunas sustancias pueden ser mortales para los animales.