La tinerfeña Sara Sálamo muestra su apoyo a Jenni Hermoso: "Es insoportable"

Desde que Luis Rubiales plantó un beso a la jugadora Jenni Hermoso tras ganar España el Mundial de Fútbol Femenino muchas son las voces que se han alzado para apoyar a la deportista y rechazar dicho acto.

Una de estas voces ha sido la de la actriz tinerfeña Sara Sálamo que, junto a su marido, el también futbolista Isco Alarcón, han mostrado en todo momento su apoyo a la jugadora de la Selección.

De hecho, la propia Sara Sálamo denunciaba recientemente haber recibido amenazas tras defender a Jenni Hermoso. Así, colgó en su cuenta de la red social X (antes Twitter) el mensaje que había recibido de un usuario, etiquetando a la policía.

"Hola @policia a ver cuándo llega el momento de rastrear todas las IPs y dejar de consentir este tipo de agresiones y amenazas, aunque sean virtuales", escribió.

En concreto, la amenaza había llegado en forma de tweet: "Que te va a decir este calzonazos si su mujer es otra que había que matarla y tirarla al río". Así, por defender a una mujer de un acto no consentido, la actriz se vio atacada bruscamente, lo que también ha provocado que le lleguen muestras de apoyo.

"Es insoportable"

A pesar de las amenazas, Sara Sálamo ha seguido mostrando su apoyo a Jenni Hermoso, tanto en declaraciones a los medios como a través de sus redes sociales. Y de hecho, este mismo miércoles ha reflexionado sobre los cánones que deben cumplir las mujeres, incluso siendo víctimas de una agresión.

"Perdonadnos por no cumplir vuestros cánones incluso cuando sufrimos una agresión. Hemos llegado a un punto, en el que se nos exige incluso ser la víctima modelo. Un 10 de víctima. No vaya a ser que pongamos el foco en los agresores… (Como se comporte una víctima no deshace el abuso)", ha publicado la actriz.

Un mensaje directo a la sociedad en plena polémica del beso que ha querido relacionar con la violación de la Manada a una joven en San Fermín en 2016.

"Llegamos a un punto en el que víctimas como la de la brutal violación grupal de La Manada, fue juzgada y revictimizada por hacer “vida normal” tras la agresión. Esto es insoportable", expone.