Una reconstrucción con IA de una momia guanche aviva la polémica en Twitter

"Es pura fantasía" señala un experto en la red social tras ver la "idealización" de un modelo facial realizado con Inteligencia Artifical

Reconstrucción facial con IA de una momia guanche

Reconstrucción facial con IA de una momia guanche

Una reconstrucción facial con inteligencia artificial de una momia guanche ha avivado la polémica en redes sociales, en concreto en Twitter. El perfil PAR - Arqueología y Patrimonio Virtual, un proyecto dedicado al diseño y documentación con tecnologías de visualización gráfica por ordenador, tanto de momias como otros vestigios tales como lugares o ciudades que existieron en el pasado y todo basado en datos científicos, ha criticado el trabajo de reconstrucción facial elaborado por el usuario @javilopen.

Este usuario había recreado la que supuestamente sería la cara de una momia guanche encontrada en el barranco de Herques, en Tenerife. El resultado: un guanche de película. Un hombre con la cara angulada, sobre todo en pómulos y mandíbula, pelo largo y rubio, y tez morena.

La imagen ha sido calificada como "pura fantasía", se señala desde la cuenta PAR - Arqueología y Patrimonio Virtual. Señala que "Estaban tardando; esta imagen hecha por IA, no es una reconstrucción facial sino solo pura fantasía", apunta para abrir un hilo en el que explica cómo se realiza de forma científica una verdadera reconstrucción facial utilizando técnicas forenses.

Una reconstrucción facial con procedimientos científicos

De esta manera, se explica que "la reconstrucción facial es una técnica forense que consigue, mediante el estudio de los restos del rostro de una persona (ya sean óseos o, también, tejidos blandos conservados) una aproximación a su apariencia en vida. Esto se logra mediante el añadido, en puntos concretos, de unos elementos llamados marcadores de espesor facial que, en base a estadísticas científicas, determinan el grosor de los tejidos blandos en cada punto del cráneo", explica.

Añade que "de forma paralela, se posicionan uno a uno los músculos del rostro siguiendo criterios anatómicos, de modo que estos proporcionen un volumen aún más cercano a la realidad del rostro de la persona estudiada. Estas técnicas, de forma combinada, permiten desarrollar tanto aproximaciones 2D como 3D al rostro de una persona a partir de su cráneo".

Reconstrucción facial con ciencia forense

Reconstrucción facial con ciencia forense

En este sentido, profesionales como Cicero Moraes han llevado a cabo test ciegos que permiten estudiar la fiabilidad de esta metodología, obteniendo buenos resultados y permitiéndonos asegurar, con determinado grado de certeza, la idoneidad de la misma, explican en la citada cuenta de Twitter.

Ahora bien, cuando a una IA se le entrega una imagen y se le dice que haga algo con ella, la IA no dispone de la base 3D geométrica del cráneo y, por lo tanto, únicamente lleva a cabo una invención, pura y dura, a partir de la imagen ofrecida, refrenda  PAR - Arqueología y Patrimonio Virtual.

Reconstrucción facial con IA

Reconstrucción facial con IA

Insiste en que "este tipo de usos de la IA únicamente profundiza en lo que ya hemos comentado en otras ocasiones -y que @Albertoxvenegas está estudiando-: la IA proyecta estereotipos falsos y contribuye a crear confusión y fakes históricos. Y, en concreto, con respecto a la imagen del primer tuit, tenemos la prueba de que esta reconstrucción es falsa".

Reconstrucción facial con IA

Reconstrucción facial con IA

Añade que Juan Villa ya ha reconstruido la momia muanche del MAN para el documental Las Momias Guanches, producido por radioTelevisión Española. E insiste en que ese trabajo ha empleado una "metodología científica".

Reconstrucción facial de una momia guanche realizada por Juan Villa

Reconstrucción facial de una momia guanche realizada por Juan Villa

Desde el perfil se señala que el intento de una reconstrucción facial de una momia guanche con inteligencia Artificial "demuestra que la IA solo consigue resultados verídicos pero estos nunca son verdaderos. No tienen ninguna base científica detrás y, por lo tanto, solo pueden generar confusión y caos. Perpetúan mitos y nos alejan de la Historia", aclara.