De acuerdo con numerosos especialistas, estamos atravesando uno de los veranos más calurosos de las últimas décadas. Por ello, es importante aprender a reconocer las principales diferencias entre un golpe de calor y el agotamiento de calor.

El verano representa la oportunidad perfecta para pasar más tiempo al sol y al aire libre. Sin embargo, ahora que la temperatura ha llegado a registros inéditos y se espera una tercera ola de calor este verano, los profesionales de la salud recomiendan a la población extremar las precauciones.

En este sentido, las altas temperaturas en verano pueden causar problemas a la salud como los golpes de calor o el agotamiento de calor. Aunque estas afecciones suelen afectar a ancianos, niños, embarazadas y enfermos crónicos, la verdad es que quienes se exponen al sol y las altas temperaturas pueden ser susceptibles a los efectos del calor.

¿Qué es un golpe de calor?

Un golpe de calor se caracteriza por que el cuerpo alcanza hasta 40 °C de temperatura interna. Entre los principales síntomas de este problema frecuente en verano se encuentran: náuseas y vómitos, dolor de cabeza, rápida frecuencia cardíaca, escasa sudoración y, en algunos casos, la pérdida de conocimiento.

Un golpe de calor requiere de atención médica profesional, de lo contrario puede ocasionar consecuencias graves e, incluso, la muerte. Tras llama a Emergencias, es necesario mover a la persona afectada a un espacio más fresco y no darle ningún líquido.

¿Qué es el agotamiento de calor?

Por su parte, el agotamiento de calor ocasiona la sudoración excesiva, deshidratación, calambres musculares y fatiga. En estos casos, los profesionales de la salud aconsejan a la población beber abundante agua o bebidas isotónicas, moverse a un área más fresca o a una habitación con aire acondicionado, así como usar ropa más ligera.

Para evitar las complicaciones derivadas de los síntomas y signos del golpe de calor y el agotamiento de calor, conviene conocer sus principales características y diferencias. De esta manera, es posible salvar nuestra vida o la de algún ser querido durante este caluroso verano.