Con una zanahoria y un poco de ketchup esta madre ha conseguido que su broma se haga viral en las redes al fingir que se cortaba un dedo ante sus hijos. La escena, que vista de muy cerca podría parecer muy falsa (por la calidad y "realismo" de los materiales utilizados) se hizo creíble para los pequeños con sólo escuchar el grito de "dolor" de su madre, que no tardó nada en girarse a la cámara para acabar la escena con una sonora carcajada.

Los niños llegan, hasta incluso, a llevar una toalla para cubrir el falso dedo cortado (que era, en realidad, un trozo de zanahoria). Eso sí, las caras de los pequeños cuando se dan cuenta de que han sido objeto de una macabra jugarreta sí que no tienen desperdicio.