El club canarista quiere agradecer públicamente el respaldo recibido e invita a la afición a crear el mejor ambiente posible en los partidos que el primer equipo aurinegro dispute en el Pabellón de Deportes de Tenerife Santiago Martín.

Las cifras aumentan con el paso de las temporadas

Como puede observar el lector en este cuadrante, el aumento de abonados ha sido notable temporada tras temporada, con la excepción del segundo año en la Liga ACB, que de los 3.043 abonados de la campaña del debut (12/13) se bajó a los 2.823 del ejercicio 13/14, es decir, una pérdida de 220 abonados, lo que no dejó de sorprender ya que el Iberostar Tenerife salvó la categoría e hizo una aceptable temporada.

A partir de ahí el aumento ha sido fijo cada año, con 249 más en la 14/15 (3.072), alcanzando en la 15/16 los 3.243 abonados, lo que representó un incremento de 171. En la campaña siguiente (16/17) el número de aficionados que reservaron y disfrutaron de sus abonos ascendió a la cifra de 3.522, es decir, 279 más que en la temporada anterior.

Estaba claro que esa cantidad de 3.522, todo un récord en la historia del baloncesto tinerfeño, iba a tener un notable crecimiento en el actual ejercicio, toda vez que el equipo, dirigido por Txus Vidorreta, se clasificó para la Copa del Rey de Vitoria, logró una meritoria e histórica quinta plaza en la ACB, disputando sus primeros play-offs en ACB, para redondear la sensacional 16/17 con la conquista de la Champions League FIBA, cuya Final Four se disputó en Tenerife.

Ese aumento se establece en 124 abonados más, para un total de 3.646, récord histórico del CB Canarias. En el seno del consejo de administración se felicitan, y con toda la razón, si bien se soñaba con alcanzar la cifra mágica de los 4.000. Solo tenían que añadirse a los 3.522 un total de 478 personas más, las que acudían al Santiago Martín pasando por las taquillas. El temporadón aurinegro se lo merecía.

Pero, claro, cada persona, cada familia, sabe cómo anda la economía en casa y cuando la crisis aprieta… el hobbie debe quedar en un segundo plano.

Insisto, el canarismo tiene que felicitarse por hacer que cada año se sumen más aficionados al Club de los Abonados.