Conquistando la NBA: 33 años del debut de Fernando Martín

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El 31 de octubre de 1986 debutó el primero de los 17 internacionales españoles que han jugado o juegan en la liga norteamericana. Pau Gasol defiende ahora los intereses de los Blazers, el mismo equipo en el que Fernando Martín desembarcó hace tres décadas cuando la NBA era un territorio completamente desconocido.

MANUEL DE LA TORRE /ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Todo comenzó el 18 de junio de 1985. El lugar, el Felt Forum (ahora conocido como Hulu Theater) ubicado en pleno Madison Square Garden de Nueva York, ‘La Meca’ del deporte. Aquel día se celebró el primer draft de la NBA regido por el actual sistema de la lotería. Y aquel día, los New Jersey Nets, hoy afincados en Brooklyn, escogieron con el número 38 a Fernando Martín Espina.

Martín acudió aquel mismo verano a Estados Unidos para conocer y probarse unos días con la franquicia. Finalmente, optó por aplazar su desembarco en la liga norteamericana y regresar una temporada más a la disciplina del Real Madrid. Una decisión en parte motivada por el deseo de disputar el Mundobasket (actual Copa del Mundo) de 1986 con la Selección Española. Por entonces, la normativa impedía disputar a los jugadores NBA cualquier competición organizada por la FIBA.

Tras ganar la Liga y la Copa con el Madrid en 1986, Fernando acudió a la llamada de Antonio Díaz-Miguel para representar a España en el Mundial de casa. La Selección firmó el quinto puesto del torneo derrotando a Italia en Madrid con 18 tantos y 5 rebotes del pívot. Esa fue su tarjeta en el que fue su partido número 86 como internacional. El último de una trayectoria con el equipo español en la que sobresalen la plata del Eurobasket 1983 y la plata olímpica en los Juegos de Los Ángeles 1984.

Del antiguo Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid al Veterans Memorial Coliseum de Portland. Como agente libre, el jugador firmó un contrato con los Trail Blazers que, ahora sí, le permitió poner rumbo a la NBA. Una aventura que apenas se prolongó durante el curso 1986-87 y que se tradujo en un total de 24 partidos (más otra presencia en los playoffs de 1987), 22 puntos y 28 rebotes. Era una época en la que la NBA no tenía nada que ver con la competición globalizada y abierta al jugador extranjero que es hoy en día. En los 80, esa rara avis que representaban los foráneos tenían que hacer frente a un sinfín de barreras tanto deportivas como culturales. Una realidad opuesta a la actualidad.

El gran momento llegó el día de Halloween. Disfraces terroríficos y trucos y tratos al margen, una jornada que ha quedado ligada para siempre a la historia de nuestro baloncesto. Apenas fueron un par de minutos los que el técnico Mike Schuler le mantuvo sobre el parqué en la derrota de los Blazers ante los SuperSonics de Seattle (110-127), pero el 31 de octubre de 1986 tuvo lugar uno de esos momentos icónicos. El debut de Fernando Martín en la NBA supuso todo un hito para el deporte de la canasta que trascendió cualquier generación. Instantáneamente se transformó en el pionero. El hombre que puso la semilla a lo que, una vez inaugurado el siglo XXI, supuso la definitiva conquista española de la NBA. Tres siglas que hace no tanto tiempo nos remitían a una dimensión tan desconocida como fascinante, y que ahora forman parte del día a día de un baloncesto, el español, que presume de haber celebrado dos Oros mundiales en los trece últimos años.

Un baloncesto que sonríe con tres de sus representantes recibiendo hace apenas unos días el anillo que les acredita como campeones de la NBA 2019. El Seleccionador Nacional Sergio Scariolo, Marc Gasol y Serge Ibaka contribuyeron al título conquistado por los Toronto Raptors el pasado mes de junio. Un trío que, a su vez, siguió los pasos de Pau Gasol. Todo un bicampeón de la NBA que ahora afronta su decimonovena temporada al otro lado del Atlántico defendiendo la camiseta de los Blazers. La misma que en su día portaron Víctor Claver, Rudy Fernández y Sergio Rodríguez. La misma que un 31 de octubre de 1986 vistió Fernando Martín. Seguramente entonces ni se le pasara por la cabeza, pero acababa de trazar un camino por el que ya han transitado un total de 17 jugadores españoles (incluidos los internacionales Johnny Rogers, Ibaka y Nikola Mirotic, nacidos fuera de España).