«Iberostar Tenerife llama a las puertas del Cielo», titula la web canarista
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COMUNICACIÓN CBC.-
Un reto para toda la Isla. Por perspectiva y por historia, el Iberostar Tenerife afrontará este domingo un desafío de máxima exigencia plagado de atractivos (Santiago Martín, 19:00 horas, DAZN). El grupo de Txus Vidorreta se mide a la Virtus de Bolonia, uno de los clásicos de la Europa cestista de todos los tiempos, por el título de la Copa Intercontinental 2020, un trofeo que la FIBA se ha empeñado en refortalecer para situarlo a la altura de su prestiogioso palmarés.
En un formato novedoso de Final Four, el equipo aurinegro jugará su cuarta final internacional de los últimos tres años ante el rival que, precisamente, le ganó en su última puja por una corona continental: la #BasketballCL del curso pasado. Recién cumplidos 80 años de vida, en los que combinó alegrías y penurias, el conjunto tinerfeño ha malacostumbrado al deporte tinerfeño a pujar por méritos de mucha solera.
La misma solera que decora las vitrinas de su oponente, favorito al título de este domingo y dueño, entre otros tesoros, de dos Euroligas, 15 ligas y ocho Copas de Italia. Casi nada. Actual líder del Pallacanestro, con tres victorias de ventaja sobre el aspirante Sassari, la «V» Negra ha diseñado un proyecto de lo más ambicioso, moldeado con el cincel de su técnico, Sasha Djordjevic: un grupo tremendamente físico, con muchas virtudes defensivas y un arsenal de recursos en ataque.
Pendientes de Milos Teodosic, que no jugó la semifinal ante el San Lorenzo de Almagro (75-67), por molestias físicas, los italianos cuentan con pólvora de sobra para pelear esta campaña por todos los títulos en juego, incluida la Eurocup y el consecuente y deseado regreso a la Euroliga.
La clase de Stefan Markovic, en la dirección, curtido en mil batallas de máxima exigencia; el físico de los Hunter, Weems y compañía, jugadores además con muchos puntos en sus manos; el buen hacer de nacionales como Ricci o Baldi-Rossi, que se mueven por encima del 43% de acierto en triples; la capacidad atlética del ex Orlando Magic, Devyn Marble, fichado a finales de enero, o el poder interior de Julian Gamble o Marcos Delía, son solo un botón de muestra del enorme potencial que deberá contrarrestar el Canarias.
Consciente de todo eso, el conjunto lagunero buscará el más difícil todavía, tratando de imponer sus señas de identidad, al abrigo de su afición, que este domingo, más que nunca, puede ser clave para romper los pronósticos.
El Iberostar Tenerife necesitará de su mejor versión, así como del Santiago Martín de las mejores ocasiones, para pujar con argumentos consistentes por un nuevo y glorioso episodio de su rica historia. Una cita imperdible para los amantes del deporte.