Cuatro de cinco: ¡Vaya fin de semana!

Exitosa semana para el baloncesto de esta Provincia. De sus cinco máximos represetativos en categorías nacionales, cuatro cosecharon triunfos. Socas Canarias, Tenerife Baloncesto y UB La Palma lo hicieron en la Adecco Oro, en tanto que el Uni CajaCanarias se lo anotó en la Liga Femenina-2. El único revés lo sufrió el Isla de Tenerife Aguere, superado en tierras peninsulares por el Universidad País Vasco. Lástima de derrota, pues hubiese sido el fin de semana más exitoso de la temporada.

El Socas Canarias afrontaba la visita del incómodo Clínicas Rincón Axarquía, filial del Unicaja de Málaga, con el hándicap de acumular tres derrotas consecutivas. La ansiedad por salir de esa crisis de resultados podía pesar mucho sobre las espaldas de los aurinegros. Sin embargo, los discípulos de Alejandro Martínez supieron encarrilar bien el partido, basando esa eficacia en una buena defensa, destacando la protagonizada por Richy Guillén y Jesús Chagoyen sobre el gigante de 222 centímetros Sinanovic, así como en la dirección de un acertado Quique Garrido y en la portentosa actuación, una vez más (y van…) de Jakim Donaldson, que valoró 35 puntos, consecuencia de sus 16 tantos, 18 rebotes, 6 mates, 3 asistencias… Una victoria que al final fue por 20 puntos y que permite a la familia aurinegra afrontar con mayor tranquilidad los dos próximos compromisos: ViveMenorca (fuera) y Melilla (en casa).

El Tenerife Rural, por su parte, tenía una comprometida salida a tierras palentinas. Tras el error cometido ante el Ourense, en el Santiago Martín, los de Iván Déniz supieron hacer bien las cosas esta vez, realizando un completo trabajo en defensa, al extremo de dejar en 58 puntos al Palencia. Sí, es verdad que los blanquiazules apenas lograron dos tantos más, pero esta vez fueron suficientes para hacer subir la tercera victoria al casillero. Y me alegro enormemente por los fieles seguidores del Tenerife, pero en especial por un hombre de esta tierra que merece el máximo de los respetos, el entrenador Iván Déniz. A ver si de una vez por todas determinados personajes se dan cuenta que cuando los apuros económicos son elevados cada triunfo cobra un valor importante. ¿Qué no divierte el juego del Tenerife?, pues vete al cine, elegi una película de Catinflas y ríe abiertamente. Ya lo dijo Martínez en rueda de prensa: «En esta Adecco-Oro no hay rival fácil! Insisto enhorabuena a los blanquiazules por este nuevo paso dado hacia la salida de la zona de peligro. Y ahora, a preparar adecuadamente la visita del Cornellá, otro rival complicado.

El viernes le remité un correo electrónico a mi amigo Sebas «Diablo» Arrocha donde le decía: «Tengo sensaciones positivas y sé que el UB va a ganar al Cornella». La respuesta del capitán palmero fue esta: «La verdad es que estamos trabajando muy bien a lo largo de la semana y el premio debe ser la victoria». Pues bien, el plantel de Rafa Sanz fue capaz de vencer a un rival crecidito tras su excelente arranque liguero. Fue, sin duda, una victoria de prestigio, la primera lejos de Miraflores, que debe hacer que el «santuario cestista» de la Isla Bonita registre el próximo viernes una gran entrada. A ver si va a resultar verdad el pronóstico de Rafa y el «UB» se cuela entre los nueve primeros…

En definitiva, pleno para los equipos de esta tierra en la Adecco-Oro, para satisfacción de sus aficionados. ¿Se imaginan así todos los fines de semana? Mejor no, porque entonces la Liga sería muy aburrida.

En féminas, cara y cruz. La alegría vino de la mano del Uni CajaCanarias. El plantel de Esther Herrero brindó un gran partido a sus aficionados, siendo capaz, en un final de infarto, de superar al Pío XII, cosechando así la sexta victoria de ocho posibles. Las chicharreras, comandadas en la pista por esa genio llamada Lidia Mirchandani, están firmando un arranque liguero de lo mejorcito. Incluso nos permiten soñar con logros importantes. Y como le manifesté a algunas de las chicas a través de Facebook, no me quiero prejubilar sin ver a un equipo de mi tierra de nuevo en la máxima categoría del baloncesto femenino español.

La única nota triste de la semana corrió a cargo del plantel dirigido por Carlitos Olano, aunque a decir verdad cayó por escaso margen de puntos en una cancha tan complicada como la del Universidad País Vasco. Esperar a que ahora, de vuelta a casa, lleguen las victorias y se hagan con un lugar en la zona media-alta. Jugadoras con calidad tienen para ello.