La crisis y el basket femenino

El Cabildo de Tenerife cogió el toro por los cuernos y trabaja por la unificación del baloncesto masculino. Sus argumentos son serios: no hay dinero pa´tantos equipos y pide el entendimiento de los dos clubes de la Adecco-Oro para que salga un serio proyecto.
En el basket femenino, por el momento, esa idea tiene que esperar al menos hasta la campaña 11/12, pues ambos clubes, como sucediera el año pasado por estas mismas fechas indican que ya tienen compromisos cerrados para la 10/11.
Las carencias económicas son notables y tanto el Uni CajaCanarias como el Isla de Tenerife tienen dificultades para cerrar la campaña anterior. Y las mismas no se deben al derroche y sí a las reducciones inesperadas de ciertos estamentos públicos que donde dijeron 30 ofrecieron finalmente 20.
La solución, en casa
Ambas entidades ya trabajan en la temporada que arrancará en octubre. Y lo harán con presupuestos reducidos, lo que debilita de manera notable sus pretenciones deportivos.
La solución está en casa y se llama cantera. Tendrán que hacer las plantillas con escasos recursos, aunque ello signifique cambiar el chip y en lugar de soñar con metas altas se deba planificar un trabajo para salvar la categoría lo más decorasamente posible.
Y por ello, por ejercer la humildad, no hay por qué rasgarse las vestiduras. Ya vendrán tiempos mejores, aunque parece evitable que lo mejor para el baloncesto femenino en esta Islita se llama unificación de criterios, de trabajo… siendo necesario obviar el protagonismo y egos.
Eso sí, la seriedad siempre debe estar presente en cada proyecto y los dirigentes de uno y otro clubes están obligados a respetar los contratos firmados o buscar el acuerdo que menos daño haga a ambas partes. El basket femenino no se merece desprecios o chapuzas.