El Isla de Tenerife vuelve a caer fuera ‘in extremis’

– Una rigurosa falta en ataque de Eva Lorenzo aborta el último ataque del partido contra Arxil
Pontevedra

ARXIL 48 (17+14+9+8)
ISLA DE TENERIFE AGUERE 47 (21+4+9+13)
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ARXIL
Onayssa Sbahi (6), Zane Jakobsone (6), Daniela Peteva (5), Rachel Allison (8), Jessica Bradley (10) -cinco inicial-, Olga Fedorova (2), Ana Martín (5), Carla Fernández (3) y María Lago (3)

ISLA DE TENERIFE AGUERE
Eva Lorenzo (7), Esther Moreno (4), Eva Serra (5), Laura Bejarano (4), Yaiza García (8) -cinco inicial-, Lesslee Mason (12) y María Espín 7).

PARCIALES
17-21, 31-25 (descanso) 40-34 y 48-47.

ÁRBITROS
Guillán y Posada (Galicia). Eliminaron a Moreno y Lorenzo.

INCIDENCIAS
Estadio de la Juventud. 200 espectadores.

El Isla de Tenerife Aguere se fue otra vez de vacío por un pelo. Después de hacer un partido en el que fue capaz de empezar bien, flojear hasta el último cuarto y llegar con vida al final, una rigurosa falta en ataque de Eva Lorenzo en la jugada definitiva dejó el resultado del lado del Arxil. La blandura morada en la zona pesó demasiado frente a un rival plagado de extranjeras y hecho para acceder a la fase de ascenso.

Como suele ser norma en sus citas peninsulares, el Isla comenzó con su mejor versión. Alegre delante y aplicado detrás, frenando a la estadounidense Allison y encontrando casi siempre la mejor opción. El representativo (todavía con Harris convaleciente de su lesión de tobillo) llegó a la primera pausa con buenas sensaciones y sembró la duda en el grupo de Maite Méndez, incapaz de asumir el descaro de las laguneras.

Entonces comenzó el calvario de las de Pernas. Olvidaron todo lo bueno hecho hasta aquí y se ‘regalaron’ un segundo cuarto deplorable, en el que toda la producción ofensiva fueron dos canastas de Mason, incapaz, para colmo, de acertar sendos tiros libres que se ganó ante Bradley. La torre del Arxil ya sembraba el pánico a su compatriota, a la que intimidó con cuatro tapones. Yaiza García, igual de blanda, completó la disonancia de su equipo.

El Isla sólo se mantuvo vivo con el enésimo intento de Pernas por cambiar el sentido del juego. Terminó por colocar a Bejarano y cinco pequeñas, alternó zonas y mixtas y obtuvo la agresividad deseada. A tres minutos del final, el Isla firmó un 0-9 (48-38 a 48-47), Arxil ya no volvió a atinar y encima se encontró sin balón en la posesión definitiva. Todo estaba de cara: Serra salió limpia de un bloqueo, armó el brazo para un triple limpio, pero entre tanto a Lorenzo le cayó una cuestionable falta en ataque justo tras soltar el pase decisivo.