La caldera de Miribilla lleva al RETAbet Bilbao a la final (75-68)

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Dominó el Melilla Baloncesto durante un buen número de minutos a través de pequeñas rentas que no fueron suficientes para poder romper el partido y eso, ante un gran rival como es el RETAbet Bilbao, terminó por costarles una remontada que tuvo en la afición de Miribilla a su principal protagonista. Así, los de Álex Mumbrú disputarán la final por el ascenso ante un fortalecido Iberojet Palma.

SEMIFINAL 2: RETAbet Bilbao vs Melilla Baloncesto (75-68)

Teñidas de blanco y negro para animar a su equipo en compañía de las otras tres aficiones, las gradas de Miribilla pudieron disfrutar de uno de los mejores encuentros de la temporada en una semifinal que terminó por decantarse del lado del RETAbetBilbao Basket tras un igualado y exigente encuentro.


Los dobles intentos no pueden con la igualdad inicial (18-18)

Prometía ser un gran partido y, ya desde el comienzo, no defraudó. Una noche que comenzó con el RETAbet Bilbao Basket sumando el primer parcial de la noche gracias al impulso de una afición entregada (5-0) y en la que el Melilla Baloncesto no tardó en contestar desde la defensa para presentar así su candidatura a todo (5-9). Con losl ocales generando a través del pick & roll y los visitantes aprovechando los centímetros de Felipe dos Anjos en posiciones cercanas al aro el partido comenzó a ser vistoso en ataque y agradecido en defensa donde ambos equipos se esforzaban para tratar de generar así algunas ventajas a lo largo de un primer cuarto en el que ni el empuje exterior de Jaylon Brown ni la lucha de Dos Anjos fueron suficientes para poder romper con la igualdad en el marcador (18-18).

 

Intensidad, más intensidad y de nuevo igualdad (20-20)

Con el encuentro totalmente incontrolable, ambos equipos trataron de hacerse con el mando de todas las maneras posibles tras el primer entreacto, pero ni uno ni otro llegaron a conseguirlo. ¿El motivo? La igualdad reinante también en los guarismos con aspectos claves como los porcentajes de tiro o el rebote muy parejos lo que hacía complicado que las rentas se pudieran ir mucho más allá de los cuatro puntos de los que llegaron a gozar ambos en un par de momentos. Y eso que el Melilla Baloncesto intentó romper en los últimos minutos de un segundo cuarto en el quede nuevo la consistencia interior llevó a los de Alcoba a colocarse por delante en el marcador (34-38) pero el tiempo muerto de Álex Mumbrú unido a un tapón ilegal sobre la bocina permitieron a los bilbaínos el poder llegar de nuevo al descanso con tablas en el marcador (38-38).

 

Melilla Baloncesto toma la delantera pero no rompe (17-20)

Se había sentido cómodo el Melilla Baloncesto anticipándose a las líneas de pase para poder correr y así volvieron a hacerlo los visitantes en el tramo inicial de un tercer cuarto que no tardó en tomar color azulón. Todo ello gracias al buen trabajo desde la dirección de Josep Franch y a la capacidad atlética de un Caleb Agada que comenzaba a hacer de los suyas para poder poner tierra de por medio (45-51).Seis puntos que parecían todo un mundo a tenor de la igualdad reinante y que aportaron oxígeno y frescura a un Melilla Baloncesto que pasaba a jugar con una mayor tranquilidad. Llegando a gozar de hasta un +7, los de Alejandro Alcoba lograron llegar al último cuarto por delante y eso, tal y como estaba la noche,comenzaba a ser sinónimo de buenos presagios (55-58).

La caldera de Miribilla pone el resto hacia el triunfo (20-10)

Parecía que los visitantes podían darle un zarpazo al encuentro pero, esa confianza terminó por convertirse en el peor aliado de los visitantes quienes, en poco más de un minuto, vieron como las tornas se invertían. Así lo consiguieron los Hombres denegro con un triple de Rafa Huertas desde la esquina primero y un 2+1 de Ben Lammers después que supusieron un duro 6-0 para los intereses de los de la Ciudad Autónoma. Paró el partido Alejandro Alcoba pero, una nueva imprecisión,en este momento a modo de falta en ataque, terminaba por hacer mucho daño al Melilla Baloncesto cuando Ben Lammes machacó su aro tras la asistencia sin mirar de Javi Salgado (63-58). Quedaba poco por jugarse pero el marcador apena sregistró un gran crecimiento con un Melilla totalmente atascado en ataque y un RETAbet Bilbao que tenía que luchar cada punto hasta el final (68-63). La renta a falta de dos minutos era de cinco puntos pero, para entonces, el RETAbet Bilbao había ganado ya lo más importante, confianza de cara al tramo final (75-68).