Multitudinaria despedida a Justo Ocón Jiménez

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AGUSTÍN ARIAS.-

 

El DEPORTE tinerfeño, especialmente la gente del baloncesto y del tenis, así como infinidad de amigos y conocidos, despidieron esta tarde al querido JUSTO OCÓN JIMÉNEZ. La capilla del tanatorio de Santa Lastenia fue insuficiente para dar cabido a tanta gente que arropó a la familia en tan difíciles momentos. Lágrimas de compañeros de equipos en los que jugó en su trayectoria cestista y manifestaciones de dolor por que consideraban «injusto» que a sus 54 años y siendo un gran deportista se nos haya ido precisamente en una cancha de tenis mientras jugaba un partido con el equipo B de veteranos del Náutico en las pistas del Club Tagoro de Tacoronte.

Resultaba difícil pronunciar palabra o expresar el sentimiento de angustia y dolor en el momento de estar junto a Patricia, su esposa, sus hermanos, sus sobrinos o su cuñado Carlos Martín, presidente del CB Unelco. Justo se nos ha ido y sus seres queridos han podido comprobar el alto cariño que la gente con la que ha compartido asistencias, triples o raquetazos al borde de la red de tenis, le tenía. Esa misma gente que esta tarde, en tu despedida, seguían elogiando tu excelente condición humana.

Su Náutico, campeòn Insular Sénior 

Compartí esos momentos de desolación con sus compañeros del equipo de veteranos del Náutico, esos chicos que rondan, incluso pasan, los cincuenta. Y les decía, desde el corazón: «Tener mucho cuidado cuando salten a una cancha; no olviden que ya no tienen 25 ó 30 años y que ya la mente les dice una cosa pero el cuerpo no le responde en esa dirección. Hacer deporte sí, pero consciente de que ya hay unos límites».

No quiero, porque son mis amigos, gente a la que seguí como periodista desde que jugaban al Minibasket, tener que pasar, de nuevo, por los difíciles momentos de buscar fotos de archivo para completar una nota en la que no cuento los puntos anotados sino hacer partícipes a la amplia familia del baloncesto de la desagradable noticia de la pérdida de uno de los nuestros.

Descansa en Paz, querido JUSTO OCÓN. Siempre te recordaremos por tu grandeza como deportista y en especial como persona. 

Guillermo Cejas, Justo Ocón, «Pepe» Naresh y José Carlos Cabrera, el pasado viernes en la cancha nauta    

Carta abierta del árbitro Naresh «Pepe» Hathiramani

Querido y estimado Justo:

Hoy, dentro de unas horas y, por primera vez desde que nos conocemos (casi 40 años), me tendré que despedir de ti sin un «hasta luego”, o un «hasta el próximo partido» y sin nuestro abrazo cada vez que nos veíamos, tanto dentro como fuera de las Canchas.

Será un «adiós», pero acompañado de un «hasta pronto», ya que a todos nos toca irnos de aquí tarde o temprano.

Desde ayer solo vienen a mi mente los años de amistad que tuvimos, las charla en el Colegio La Pureza, y nuestros «reproches» en las Canchas, por chiquilladas, ya que así éramos nosotros, dos «chiquillos cincuentones y con canas», que nos lo pasábamos bien en los Partidos y, pasase lo que pasase, siempre nos dábamos un abrazo antes y después de todos los Encuentros.

Me queda el sabor amargo de no haber aceptado tu invitación, para unirme a vosotros en la Cena del pasado Viernes, y así haber pasado más tiempo contigo, pero me queda la alegría de haber tenido tu amistad desde el día en que nos conocimos.

Solo yo se lo que siento y las lágrimas que he soltado desde que recibí la desagradable noticia, pero, tal y como quedamos, intentaré seguir un año más en el Arbitraje, como mi pequeño Homenaje a ti y a nuestra amistad.

Se que desde allí arriba seguirás viviendo tu pasión por el Baloncesto como hacías aquí y seguro que oiré tu susurro diciéndome con cariño: «¡¡ cabrón, eso no fue falta !!» o «Pepe, ¿ahí no pasó nada?», las frases más comunes que siempre me decías en casi todos los partidos, y que cuando no me la decías, yo te solía preguntar: «Justo, ¿estás bien hoy, que no me protestas nada? ❤️

¡¡ Amigo mío, que tengas un muy buen viaje y nos sigas queriendo a todos como lo hacías aquí !!

Jaime Blanco 

«Justo, fuiste uno de mis héroes de juventud. Aprendí a jugar a baloncesto contigo y te he admirado y respetado siempre. Cada fin de semana íbamos a verte jugar junto a Coriolo, Carlos Suárez, etc en el Cobrasolar.

Recuerdos de mi adolescencia que me acompañarán siempre. Con los años incluso has ido siempre a mejor. Has sido una persona afable en el trato y respetuosa. Te has ido muy pronto.

Espero que los tuyos lo superen lo antes posible. Descansa en Paz Justo. Nunca olvidaré lo bien que te portaste conmigo.

Lo mejor que se puede decir en Canarias de una persona como tú es que ¡¡¡ eres un puntal !!!

Ignacio de Esquiroz Pérez

Hola Justo, me acabo de enterar que te has ido, que decirte.. Tú que amabas el deporte como nadie. Que lo sentías.  Que lo disfrutabas……

Te has ido haciendo lo que más te gustaba, pero sinceramente no lo termino de encajar.

Siento haberte fallado, ya no podré cumplir mi palabra de jugar un día al tenis contigo, o animarme como en su momento me dijiste a lanzar unos tiritos en la cancha, pero lo que ahora siento profundamente es que ya no recibiré tu sonrisa en el RCNT. Ni tus palabras… Ni tendremos nuestras conversaciones como no, “de deporte”, en las que intercambiábamos anécdotas especiales de baloncesto y tenis, o esos momentos en los que me dedicabas tu aliento con tus mejores deseos en mis competiciones. «Un día me animaré Ignacio, el atletismo puede ser interesante», me decías.

Te echaré mucho de menos, Justo, mucho Hasta siempre amigo.

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Enrique Arriaga Álvarez

Nos ha dejado una gran persona y un gran amigo: Justo Ocón.

Lo conocí hace mucho tiempo y en los últimos años ha sido el nexo de unión del equipo de baloncesto del Náutico Veteranos, tanto en lo deportivo como en lo personal.

Él era el alma de los quintos tiempos y el que nos animaba a todos a seguir un año más.

El viernes compartimos el último quinto tiempo, celebrando el título de liga.

Te echaremos mucho de menos. D.E.P.

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Estimado compañero y amigo Justo,

No llegamos a coincidir demasiado, a penas unos cuantos partidos en el Torneo Salvador Lecuona. Aún así, siempre me pareciste un tipo amigable, con un gran espíritu deportivo (en el más amplio sentido de la expresión) y siempre atento a los compañeros.

Espero que tu nuevo viaje sea grato y luminoso.

Un fuerte abrazo

Carlos Correa Correa

Querido amigo,

Te escribo estas líneas que aunque llenas de tristeza me quedo con la satisfacción de haberte conocido. El tenis fue nuestro punto de conexión, fueron muchos los partidos que compartimos “por amor al juego” ese gran lema del Torneo Salvador Lecuona 
Espero que allá donde estés encuentres donde jugar tenis…. D.E.P

Carlos Cólogan

Le conocí en el Teobaldo Power. Le recuerdo jugando, volando diría yo, porque cuando cogía la bola solo sabía hacer magia.

Le admiraba como solo lo hacen los adolescentes. Años después sus hijos y los de mi hermana Nieves trabaron una intensa amistad y lo volví a tratar.

Seguía siendo elegante y educado, un tío de esos que son lo que parecen. Me quedo con esos recuerdos.

Y espérame con la bola en la cancha ahí arriba para pegar unos tiros Justo.

Querido Justo, desde muy niños y hasta el otro día, al encontrarnos, ese brillo cómplice de esos niños que jugábamos en la calle, no se perdió…

Un comentario en «Multitudinaria despedida a Justo Ocón Jiménez»

  • el 27/05/2019 a las 23:38
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    En nombre de nuestra familia, y el mío propio, me tomo la libertad de agradecer a todos y cada uno de los que a lo largo de estas últimas 24 horas, de manera directa y desde la distancia, nos han hecho llegar sus calurosas muestras de respeto y cariño, que en definitiva, eran las que le profesaban a mi cuñado Justo.
    Yo no voy ahora a explicarles quién fue, porque todos sabemos de su inmensa calidad como persona y deportista, y porque de una manera u otra en todos ha dejado un recuerdo imborrable, pero sí decirles que es el producto del cariño, educación y esfuerzo de una gran madre, mi suegra, hoy castigada por una cruel enfermedad que le impide tener conciencia de lo que sucede a su alrededor, y de su hermano y hermana mayor, que en ausencia de su padre, siempre encauzaron por el buen camino su personalidad rebelde.
    Cuando entré en la Capilla estaba convencido de que podría dirigirme a todos y ofrecer personalmente nuestro agradecimiento, pero el dolor y el llanto contenido me impidió hacer aquello que todos merecían. Mis más sinceras disculpas.
    Agradezco a Agustin me permita usar este medio para llegar a todos con nuestro mensaje. Es evidente que se ha ido antes de tiempo, nos ha dejado un gran vacío y muchas cosas que hacer con él, pero en lo que a mi respecta, lo tendré siempre presente en mi corazón y en mi vida, como siempre ha sido desde que lo conocí siendo un “impertinente” mocoso de 10 años, a raíz del inicio de mi relación con su hermana, hace ya 44 años.
    Fue el “culpable” de que mis dos hijos practicaran este bello deporte que a todos nos cautiva: El Baloncesto, lo que siempre le agradeceré
    Reiterando nuestro agradecimiento.
    Carlos Martin Hernandez.

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