«Se acabó la cuenta. Toca dejar de pensar en la rodilla y ponerse las pilas», afirma Javier Beirán

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Esta imagen de felicidad sustituye a…

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… esta otra, nueve meses antes

«Gracias de corazón a todos los que habéis estado a mi lado de una forma u otra en algún momento de la recuperación. Espero devolveros de alguna manera todo ese cariño y energía que me habéis estado dando» 

JAVIER BEIRÁN, una de las más importantes referencias del Iberostar Tenerife, colgó hoy en su rincón en redes sociales, una nueva «carta abierta». Tal vez sea la última de los 291 días en los que ha permanecido viviendo y sufriendo las consecuencias de su grave lesión. Esto publicó hoy:

Día 291 – «Todo lo que pasa, pasa por algo pero, sobre todo… pasa para algo. Aceptarlo no es resignarse (ni parecido), sino comenzar a transformarlo».

Se acabó la cuenta. Toca dejar de pensar en la rodilla y ponerse las pilas. El domingo ya empieza la liga y físicamente estoy al cien por cien. Han sido muchos días de esfuerzo y sacrificio, largas horas en solitario con un único objetivo y numerosas cosas merodeando mi cabeza.
Solo uno mismo sabe todo lo que ha trabajado y por ello siempre es más fuerte.

Las cosas podrán ir bien o mal pero yo sé que soy más fuerte físicamente (nunca había trabajado así en un gimnasio) y mentalmente (nunca había tenido tanto tiempo para pensar y analizar muchas cosas, mucho tiempo a solas).

Es duro que de un día para otro pases de un deporte colectivo a uno individual. De compartir tus alegrías y penas con tus compañeros de equipo, como he hecho 20 años, a estar tú solo cada día frente al gimnasio y tu fisio. Pero es por lo que hay que pasar y aquí estoy, recuperado, con muchas ganas de volver a sentirme igual de feliz jugando como lo hacía antes de la lesión y dispuesto a echar una mano a todo el que esté viviendo o, por desgracia, vaya a vivir una lesión similar.

Gracias de corazón a todos los que habéis estado a mi lado de una forma u otra en algún momento de la recuperación. Espero devolveros de alguna manera todo ese cariño y energía que me habéis estado dando. 

¿Buena suerte? ¿Mala Suerte? ¡Quién sabe!