La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha asegurado hoy que el Gobierno "no estaba tan enloquecido" cuando acordó con Podemos subir el salario mínimo interprofesional (SMI) un 22 % en 2019, hasta situarlo en los 900 euros mensuales, después del pacto cerrado en Francia.

En una jornada sobre el futuro del trabajo, organizada en el Consejo Económico y Social (CES), la ministra se ha referido al anuncio realizado por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, para subir el salario mínimo en 100 euros, hasta situarlo en los 1.598 euros, tras las protestas de los "chalecos amarillos".

"No estábamos tan enloquecidos cuando hemos decidido subirlo", ha asegurado la ministra, que sólo se ha lamentado de no haberlo decidido hacer con "una metodología más participativa", algo que le había reprochado el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, dado que se trata de una materia que se aborda en la mesa de diálogo social.

Asimismo, la ministra ha recordado que la subida del SMI para 2019 se aprobará mediante un real decreto antes de que termine el año, normalmente en el último Consejo de Ministros de diciembre, lo que beneficiará de entrada a más de 1.340.000 empleados cuyos salarios son inferiores al SMI.

Valerio ha recordado que los salarios no han participado del crecimiento del mercado, y han sufrido una pérdida de valor adquisitivo, ya que en los últimos años se han revalorizado un 5,4 %, mientras que el IPC ha subido un 11,6 %.

Además, ha dicho, las rentas empresariales han crecido un 11,2 %, mientras que las salariales lo han hecho un 3,8 %, por lo que "es el momento de redistribuir los beneficios".