En la historia de la humanidad, pocas invenciones han generado un impacto tan profundo y duradero, como la creación de la imprenta. Indiscutiblemente, el mundo moderno sería muy diferente sin el invento alemán.

En este sentido, la imprenta representó una completa revolución durante la edad media. La imprenta de Gutenberg, permitió que los libros se masificaran, permitiendo así la difusión del conocimiento. Esto gracias a la rapidez y facilidad de reproducción, y a la reducción de los costes relacionados.

Así, la imprenta fomentó la alfabetización, así como la divulgación y creación de conocimientos. También contribuyó en el fortalecimiento de la economía en las principales ciudades europeas.

Durante los inicios de los centros de imprenta, bajo autorización del monarca respectivo, se dedicaban a la reproducción de obras tradicionales. Este fue el caso de la imprenta valencia, la primera en establecerse en suelo español. Sin embargo, con el tiempo la impresión se fue expandiendo, superando los veinte millones de libros reproducidos sólo en España.

Algunos expertos, aseguran que la imprenta fue el detonante que originó el consecuente final de la edad media. Así como el fin del feudalismo, y el inicio de siglos y siglos de avances científicos, tecnológicos, filosóficos y políticos.

Evolución de la imprenta en España

Tras la invención de la imprenta por Gutenberg en 1450, los talleres de impresión se fueron asentando en las principales ciudades de la época. Así, a España llegó un par de décadas más tarde de la mano de maestros impresores alemanes e italianos.

En este sentido, los expertos aseguraban que la primera imprenta se estableció en Valencia en el año 1475. Seguidamente el invento llegó a Segovia, Barcelona, Zaragoza y Sevilla. En sus inicios los talleres españoles se dedicaron a la impresión de obras tradicionales.

Inicialmente dichas obras se reproducen en lenguas vernáculas. No obstante para mediados del siglo XV, ya existían decenas de millones de libros impresos en talleres españoles. Ya habiendo adoptado el latín como la lengua elegida para la reproducción de libros, sólo una cuarta parte permanecía en el dialecto nativo.

Durante los primeros tiempos la invención no causó mayor revuelo en el nuevo mundo. Sin embargo, tan pronto como esto cambió el mercado se amplió la demanda de libros se expandió considerablemente.

Menos de un siglo después de su creación, la imprenta se convirtió en un instrumento al servicio de las coronas y las religiones. Tanto o más de lo que sirvió en beneficio del conocimiento. Así, las impresiones recurrentes abordaban el adoctrinamiento eclesiástico, aunque aún permanecía el interés por los clásicos de la época.

Valencia, cuna de la imprenta en España

La historia de la imprenta en España se inicia en la floreciente ciudad valenciana. Los registros históricos señalan que la primera obra literaria española impresa fue Obres e trobes en lahors de la Verge Maria. Esta se reprodujo en lengua valenciana el día 25 de marzo de 1474.

En aquel entonces, Valencia no sólo se presentaba como una ciudad pujante, también centro económico y cultural de España. Esta contaba con más de 75000 habitantes, en contraste con ciudades como Barcelona o Zaragoza que sólo alcanzaban 30000 y 20000 respectivamente.

Por otra parte, esta localidad ya disponía de una extensa tradición en la elaboración de papel. Esto favoreció la implementación de talleres de imprenta valencianos. Además, en la citada ciudad ya se venían practicando algunas técnicas afines de impresión para la fabricación de naipes. Así, como serigrafía para el estampado de papel y otros objetos domésticos.

Estas particularidades favorecieron la formación de la ciudad de Valencia como el principal centro editorial de la corona española. En este sentido, la actividad de los talleres contribuye al fortalecimiento de la ciudad, manteniendo así su posición preferencial sobre otras ciudades.

En la actualidad, Valencia conmemora su tradición en el mundo de las imprentas con el Museo de la Imprenta y las Artes Gráficas de El Puig. Este se encuentra en el interior del Monasterio de Santa María. Además, es reconocido como el museo más importante sobre el tema en España, y el segundo en Europa.

La imprenta española en la actualidad

Mucho tiempo ha transcurrido desde la impresión de las primeras obras reproducidas en dialectos vernáculos. Desde entonces el arte de la impresión se ha visto influenciado por internet y las nuevas tecnologías. Ha evolucionado para ofrecer procesos y resultados óptimos, con presupuestos cada vez más reducidos.

En este sentido, los conceptos y procedimientos propios de la imprenta online forman parte del día en la impresión española. Este tipo de técnicas permite disfrutar de diversos servicios de impresión digital, offset y gran formato.

Entre los principales beneficios de la imprenta online se destacan el trato personalizado, envío gratuito del producto final, y una extraordinaria velocidad. Además, el uso de técnicas digitales permite que calidad y precio vayan de la mano, obteniendo así los mejores resultados al mejor precio.