El Gobierno de EE.UU. calificó hoy de "muy desafortunada" la decisión de Venezuela de denunciar la Convención Americana sobre Derechos Humanos (CADH), e instó a Caracas a que recapacite sobre esa medida.

Venezuela denunció el lunes a la CADH mediante una nota oficial enviada a la Organización de Estados Americanos (OEA), para concretar su retirada de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y de la CorteIDH.

Una portavoz del Departamento de Estado, que pidió el anonimato, dijo hoy que la decisión de Venezuela de denunciar a la CADH, la cual ratificó en 1977, "es muy desafortunada".

"Nos hacemos eco de la esperanza del secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, de que Venezuela recapacite acerca de su acción", agregó la portavoz.

"La Corte Interamericana de Derechos Humanos es una organización respetada que protege la democracia y los derechos humanos, expone abusos, y establece condiciones para exigir cuentas a los infractores. La valoramos enormemente y creemos que la comunidad interamericana ha mejorado y se han enriquecido por ella", enfatizó.

El presidente venezolano, Hugo Chávez, dijo hoy que su Gobierno tiene "bastantes argumentos" para justificar la denuncia y señaló que "lo último" que hizo la CorteIDH fue dar apoyo a "un terrorista venezolano" y "prófugo de la justicia", en referencia a un fallo a favor de Raúl Díaz Peña.

Díaz Peña fue acusado de participar en un atentado con explosivos contra las sedes diplomáticas de España y Colombia, en Caracas en 2003 que dejó cuatro personas heridas, y recibió una condena de 9 años de cárcel.

Pero la decisión de Venezuela, que marca el inicio del período de un año de preaviso de abandonar la CorteIDH, también fue criticada por varias organizaciones no gubernamentales venezolanas como el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), Espacio Público, una ONG para la libertad de expresión o el Centro para la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil).

Para Viviana Krsticevic, directora djecutiva de Cejil, la decisión de Venezuela "deja a millones de personas por fuera de la tutela de los derechos humanos", y apoya la solicitud de que Caracas no se retire de ese organismo y que EE.UU. la ratifique.