Una delegación de dirigentes opositores acudió el miércoles a la OEA para denunciar las recientes "alteraciones constitucionales" del presidente Chávez que, en su opinión, "podrían traer confrontaciones innecesarias" al país.

Los diputados se reunieron con el secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, a quien entregaron un documento para que el organismo actúe ante la que consideran "una devastación de la democracia" provocada por Chávez.

"Aspiramos a que el mundo conozca la situación de Venezuela, que el Consejo Permanente discuta el tema y ojalá que se pueda oficializar una comisión de buena voluntad de países amigos que viaje a Venezuela", dijo Ismael García, diputado del partido Podemos.