El Gobierno de Canarias entregó ayer al Cabildo Insular de Tenerife la obra de ampliación de la depuradora Adeje-Arona, que permitirá, a 320 agricultores y a los municipios de la comarca Sur, disponer al día de 40.000 metros cúbicos de agua regenerada y de calidad, prácticamente el doble de la cantidad con la que cuentan hasta ahora.

Esta infraestructura, desarrollada por la Dirección General de Aguas de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias -que ha contado con un presupuesto de ejecución de 21 millones de euros procedentes de fondos europeos, estatales y autonómicos-, incorpora un nuevo sistema de secado de fangos que elimina hasta el 80% del agua de estos, lo que aumenta la eficacia de su gestión desde un punto de vista medioambiental. La inversión en este último sistema supera los cuatro millones de euros y fue financiada por el Cabildo con cargo al Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan).

Este equipamiento forma parte del vigente Convenio de Obras Hidráulicas con el Estado y supuso la ampliación del sistema de pretratamiento y de la propia depuradora, de forma que permite llegar a producir esos 40.000 metros cúbicos diarios (el equivalente a unas 16 piscinas olímpicas), y, si fuese necesario en el futuro, ampliar esa capacidad hasta los 60.000 metros cúbicos diarios de agua tratada. Aportará estos caudales de agua a explotaciones agrícolas, sistemas de riego público y otros servicios de la zona sur de la Isla emplazadas entre los municipios de Arona y Santiago del Teide. De forma directa beneficiará a 320 agricultores, aunque con la ampliación daría servicio a una cifra similar de profesionales en Guía de Isora y en Santiago del Teide.

Responde a la necesidad de adaptar el sistema de depuración de esta zona de Tenerife, que data de 1998, a las necesidades actuales, tanto por el crecimiento poblacional de la franja territorial -sobre todo en épocas de mucha población vinculadas a temporadas de alta ocupación turística-, como por la necesidad de aumentar los criterios de carácter medioambiental en la gestión del agua y garantizar un suministro estable al sector agrícola a un precio moderado y de calidad constante.

El último de los trabajos realizados fue la incorporación de ese sistema de secado solar de fangos. En la actualidad, el fango resultante del proceso de depuración es recogido y transportado al Complejo Medioambiental de Arico para su gestión. El vigente se trata de un sistema que representa costes de transporte y gestión muy elevados, además de ser ineficiente desde el punto de vista energético. El nuevo sistema elimina el 80% del agua, frente a un 27% actual, lo que supone un volumen mucho menor en el transporte y un coste, por tanto, también mucho menor.

La presidenta de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (Asaga Canarias), Ángela Delgado, presente en el acto, considera que el aumento del caudal de aguas residuales tratada en estas instalaciones "supone una garantía de abastecimiento para los regantes del sur, de los más afectados por la sequía de los últimos años y por la padecida a lo largo del pasado mes de diciembre".

Ángela Delgado entiende que "aumentando la gestión de estas aguas residuales estamos aprovechando un recurso infrautilizado, estamos contribuyendo a incrementar la oferta de agua para los agricultores y estamos siendo más sostenibles si nuestra aspiración, tal y como dicta la Unión Europea (UE), es completar el ciclo integral del agua".

Desde Asaga Canarias también se señala la necesidad de que las aguas regeneradas que se obtengan a partir de ahora cuenten con una calidad suficiente para ser utilizadas en la agricultura, "ya que es vital para los agricultores disponer de un recurso, tan escaso y limitado como es el agua, no solo en cantidad sino con una conductividad baja para que no se perjudique a los cultivos".