El Cabildo de Tenerife ha admitido a trámite las alegaciones presentadas por Podemos y colectivos y trabajadores del Teide, lo que supone frenar, de momento, la aprobación del reglamento del Parque Nacional en los términos que pretendía el gobierno insular.

En febrero se recogieron más de medio millar de firmas de ciudadanos en apoyo a las alegaciones contra la aprobación inicial del Sistema Integral de Uso Público del Parque Nacional del Teide.

Dichas alegaciones, dirigidas al Ministerio de Medio Ambiente, la Consejería de Política Territorial del Gobierno de Canarias y el área de Medio Ambiente del Cabildo, se basaron, fundamentalmente, en señalar que tanto la ordenación normativa como la gestión son competencia de la Comunidad Autónoma y que un reglamento de servicio de una administración local no es un instrumento válido para regular el modelo.

Según los firmantes, la forma correcta sería un plan de uso público y consideran "políticamente incorrecto que el Cabildo lanzara este reglamento, que no se ajustaba a derecho y entorpecía la capacidad de ese futuro plan, a pocos meses de que venciera el plazo para la aprobación del nuevo Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Nacional del Teide".

La base para las alegaciones consistió en exigir la aprobación de dicho plan en plazo y forma, y solicitar que se anulara este reglamento hasta que dicha normativa fuera publicada, al entender que el Cabildo no tiene competencias para ello.