Un carril cortado y las grúas actuando. Así amaneció ayer la playa de Las Teresitas para que los nuevos adjudicatarios de la explotación de los nuevos kioscos de comidas pudieran empezar a hacer acopio de materiales para poder montar sus estructuras.

En este caso, la colocación de esos nuevos módulos, de unos 20 metros cuadrados, se demoró a lo largo de la mañana precisamente por su salida del Puerto de Santa Cruz, con lo que los operarios instaladores contratados por las empresas adjudicatarias trabajaron desde la madrugada en las actuaciones preparatorias consistentes en la las bases en donde se fijarán, que tendrán de forma accesoria otra más pequeña que hará la función de servicios.

La jornada, por tanto, sirvió para hacer acopio del material necesario para que con posterioridad se monten todos los elementos en las zonas previstas, que ya se encontraban perimetradas por parte de los operarios en espera de descargar todo el material que poco a poco fue saliendo del puerto santacrucero.

Lo cierto es que el ayuntamiento anunció desde el miércoles ayer el corte del carril más cercano al perímetro de la playa lo que ocasionó alguna que otra molestia a los ciudadanos que no se habían informado de las operaciones que se iban a realizar a lo largo del día de ayer, tal y como pudo comprobar EL DÍA.

En total se montarán un total de ocho chiringuitos, siendo la superficie de cada quiosco de 20 metros cuadrados, mientras que la de la terraza será de 50 metros cuadrados. La superficie de los aseos ecológicos será de 7,32 metros cuadrados.

El área máxima de cada paño de hamacas en temporada alta se sitúa en los 960 metros cuadrados, para dar cabida a 120 hamacas y sesenta sombrillas. Los quioscos estarán formados por una estructura fija de una planta que no excederá los 70 metros cuadrados, de los cuales 20 de ellos estarán destinados a la instalación cerrada y 50 a la terraza donde se colocarán mesas y sillas.

Estarán destinados a expender bebidas, fruta, helados y productos empaquetados, limitando las comidas a las elaboradas con plancha, pudiéndose instalar también cafetera y horno microondas.

Ciudadanos dice que no existe planificación

El grupo de Ciudadanos (Cs) en el ayuntamiento criticó ayer "la falta de planificación del equipo de gobierno (CC y PP) para acometer la instalación de los nuevos quioscos de la playa de las Teresitas". En este sentido, el portavoz de Cs, Enrique Rosales, aseguró que "es incomprensible que se lleve a cabo este proyecto en la principal playa del municipio en esta época del año", que "es cuando se registra un mayor número de usuarios". Apuntó que "estas obras van a suponer graves problemas para los vecinos y visitantes que quieran hacer uso de esta zona de baño", así como para "los empresarios que han apostado por invertir en los quioscos y que no podrán trabajarlos hasta después del periodo estival". Asimismo, Rosales advirtió de que "el cierre al tráfico del carril más próximo a la playa, inhabilitando también los aparcamientos que se encuentran en el mismo, va a conllevar serios problemas de movilidad en la zona". El concejal naranja hizo también hincapié en los problemas de aparcamientos que se han producido, apuntando que "si ya de por sí en los meses de verano se registran grandes colas y conseguir estacionamiento supone una complicada tarea", ahora "con estas actuaciones estos problemas se van a acentuar aún más", problemas que sufrirán al final los vecinos.

Crítica del colectivo Queremos Movernos

El Queremos Movernos (QM), colectivo de defensa de los derechos de las personas con problemas de movilidad, denunció ayer que la instalación de los kioscos en Las Teresitas han dejado a las personas con discapacidad sin playa. En este sentido, el colectivo resalta que el cierre del carril más cercano a la playa ha deshabilitado los aparcamientos para personas con movilidad reducida (PMR). Criticó "la falta de sensibilidad y de compromiso del actual equipo de gobierno del ayuntamiento y de su alcalde, José Manuel Bermúdez, con nuestro colectivo", apuntó en un comunicado, crítica de la que tampoco se libró el concejal de Movilidad, Carlos Correa.