El Cabildo de Tenerife ha mostrado este jueves su satisfacción por el archivo de la denuncia interpuesta contra el personal de la corporación insular por el funcionamiento de la piscifactoría de Aguamansa.

El Cabildo subraya en un comunicado que, con este auto, dictado tras una importante actividad probatoria, "queda claro que no hubo riesgo para la salud y que el cierre decretado por Salud Pública se produjo por motivos meramente administrativos".

El Cabildo defiende la actuación del personal, que no incurrió en ningún delito, y recuerda que la corporación insular realizó estudios que confirmaban que la actividad desarrollada en la piscifactoría de Aguamansa no puso en riesgo la salud de la población en ningún momento, algo que recoge el auto del Juzgado de Primera Instancia de La Orotava.

El auto recoge también que los trabajadores del Cabildo investigados no cometieron ninguno de los tres delitos por los que habían sido investigados (delito alimentario, contaminación del agua destinada a consumo humano y maltrato animal), al considerar que no existió riesgo para la salud de los consumidores.

Además, descarta el delito de maltrato animal porque los trabajadores se vieron obligados a poner fin a la actividad de la piscifactoría tras la orden proveniente del área de Salud Pública.

La denuncia se produjo como consecuencia del cese de la actividad decretado por el área de Salud de Tenerife del Gobierno de Canarias el pasado mes de septiembre.

A raíz de eso, el servicio del Seprona de la Guardia Civil decidió denunciar los hechos por si fueran constitutivos de delito, y posteriormente, los grupos políticos del Podemos y Partido Popular (PP) se personaron en la causa.

Sobre los motivos del cierre decretado por Salud Pública, el Cabildo apunta que, "en ningún caso", fue por la contaminación del agua de consumo.

Cara al futuro, el Cabildo maneja un anteproyecto para reconvertir la zona de la piscifactoría y destinarla uso didáctico.

De hecho, está trabajando desde hace meses en las reformas en las instalaciones del centro para replantear su uso y potenciar los usos educativos y recreativos del entorno y adquirir fincas anexas para ampliar este espacio.

Del mismo modo, se solicitará al Ayuntamiento de La Orotava el cambio de uso del suelo, a fin de adaptarlo a las nuevas infraestructuras.