"Los áridos son el producto natural más consumido por el hombre después del agua. Es una materia prima mineral insustituible y necesaria para el desarrollo social y económico. La sociedad actual no puede vivir sin este material y sin embargo hay escasez en Tenerife. El problema de esta carencia de áridos es la consecuencia de una falta de planificación a medio y largo plazo de un recurso estratégico, tan necesario e imprescindible como el agua. Es una coyuntura preocupante para la ejecución de las obras de infraestructuras previstas", alerta el presidente de la Federación Provincial de Empresarios de la Construcción (Fepeco) de Santa Cruz de Tenerife, Óscar Izquierdo.

Es más, se teme que pudiera darse el caso de que las mismas no reúnan los mínimos requisitos de calidad y seguridad establecidos por la Unión Europea debido a esta dificultad sobrevenida.

En estos momentos solo hay una cantera legal en explotación en Tenerife, concretamente en Arico, que "tiene una previsión de explotación de menos de un año. Y se encuentra en fase de restauración, por lo que la producción ya es menor", asegura.

La industria extractiva nace "para dar un servicio a los habitantes, para poder fijar a la población, atraer al turismo y generar así riqueza y calidad de vida. El marco legal vigente complica y en cierto modo imposibilita el desarrollo del sector extractivo y favorece la actividad ilegal de un impacto medioambiental muy superior, que no reúne las condiciones de seguridad y salud, colabora con la economía sumergida y compromete la ejecución y durabilidad de las obras, disparando los costes de las infraestructuras que luego se repercuten en los ciudadanos. Es una protección ambiental mal entendida, siendo una actividad imprescindible para la vida. La iniciativa privada la ve con recelo por la inseguridad jurídica en la que se encuentra aquí y ahora", manifiesta.

Para la patronal que preside Óscar Izquierdo es necesario, para el desenvolvimiento normal de la actividad económica, "generar conciencia ciudadana, de que el sector de los áridos no es el enemigo. Lo son las extracciones ilegales sin rehabilitación, ni control de los impactos que picotean todo el territorio en busca del recurso, y en ocasiones con la connivencia pasiva de nuestras autoridades. Sólo las canteras legales, realizan la actividad extractiva de forma sostenible con el medio ambiente, minimizando los impactos y constituyéndose como una oportunidad para el fomento de la biodiversidad y la economía circular".

De las explotaciones legales sólo se extrae lo que demanda la actividad económica, suministrando "a sectores estratégicos de la isla, para entre otras cosas construir casas, escuelas, hospitales, hoteles, carreteras, es decir, generar puestos de trabajo. Hay que mejorar las condiciones marco para promover la instalación de nuevas explotaciones, que eviten la paralización del sector de la construcción y aseguren el suministro sostenible para asegurar el bienestar de los ciudadanos. Es un deber de las administraciones, garantizar el suministro de cualquier materia prima estratégica como el agua o el árido, tanto como el deber de garantizar la educación o la sanidad".

Desde Fepeco se observa con "interés y expectación", las propuestas y acciones que se están estudiando para solucionar este grave problema, "tanto en el Cabildo de Tenerife como en el Gobierno de Canarias. Es importante la unidad de acción entre las administraciones y los agentes sociales, para encontrar una vía respetuosa con el medio ambiente, que no estrangule la actividad económica y a la vez impulse la calidad y seguridad en las obras".