Emmasa defendió ayer que "cumple sus deberes para la correcta gestión y tratamiento de vertidos de aguas residuales al mar", en sintonía con el compromiso último del ayuntamiento de erradicarlos por completo el año 2020.

De las seis infraestructuras que gestiona directamente la empresa, tres cuentan con las autorizaciones correspondientes y las otras tres están pendientes de resolución por parte de la Viceconsejería de Medio Ambiente o de la Dirección General de Costas.

Emmasa ha presentado -en algunos casos desde 2015- la documentación necesaria para la autorización de los vertidos en tramitación. En concreto, gestiona seis puntos: Igueste de San Andrés, la EPBAR de Cabo Llanos, la conducción de aguas abajo de la calle Anatolio Fuentes, Acorán y Añaza.