Ya se han producido los primeros contactos y reuniones en muchos de los colectivos del motor en la isla de Tenerife para, "unidos, defender el Circuito de Tenerife, ante la falta de respeto y seriedad que el Cabildo de Tenerife y sus representantes han tenido hacia los deportistas, amantes y aficionados al motor en la Isla durante todo estos años, donde nuestro sueño se ha visto truncado una vez más". Este fue el comentario generalizado en la la primera gran reunión celebrada la semana pasada, que fue secundada por los amantes del mundo de las dos y las cuatro ruedasla que asistieron a la cita.

Tras esos contactos, el mundo del motor acordó convocar una manifestación para el sábado 30 de septiembre, a las 14:30 horas, frente a la sede del Cabildo, en la capital tinerfeña.

Los participantes en las reuniones de preparación de la protesta lamentaron que la construcción del circuito del motor proyectado en Atogo (Granadilla) no termine de arrancar. El próximo 29 de agosto se cumplirá un año del acto oficial de colocación de la primera piedra. El Cabildo de Tenerife, organismo que tutela la construcción del Circuito del Motor, informó hace tres semanas que las obras estaban paradas, que "sus técnicos estaban evaluando la situación una vez reconocidas por parte de la empresa concesionaria (AXIA-Onda Rossa) las dificultades económicas que le impiden continuar con el proyecto de construcción". Salía al paso así a la denuncia que hizo la consejera insular del PP Natalia Mármol, publicada por EL DÍA el 25 de julio, de que las obras estaban del circuito estaban paralizadas.

El malestar generado entre aficionados, deportistas y colectivos del motor ha ido en aumento: "Hemos decidido mantener esta reunión para luchar juntos y que el circuito de velocidad sea una realidad. Una vez lleguemos a un acuerdo unánime con una hoja de ruta, convocaremos a todos los medios de comunicación para precisar las medidas que vamos a adoptar", añadieron los organizadores de la iniciativa.

Una vez Natalia Mármol, del PP, denunció el retraso de las obras en el circuito, el Cabildo aseguró: "Desde que esta Corporación comenzó a detectar la ralentización de las obras, han sido numerosas las gestiones y requerimientos realizados a la empresa hasta que Onda Rossa informó formalmente (el pasado mes de marzo) de las dificultades financieras que atravesaba la empresa y que estaban intentando solucionar". La Institución insular reiteró su compromiso para sacar adelante un proyecto, que se remonta a casi 50 años. "Ante esta lamentable situación, que ha derivado en la paralización de las obras el pasado mes de junio, el Cabildo de Tenerife buscará una solución con un cronograma de actuaciones para recuperar el tiempo perdido".

El 31 de julio hubo una reunión entre representantes del Cabildo y las federaciones de automovilismo y motociclismo. En dicho encuentros se informó a sus presidentes de la situación actual y de que había que esperar por los plazos legales para poder actuar.

La semana pasada se reunieron representantes del mundo del motor (motos, coches, quads, clubes...) y aseguraron que están "más unidos que nunca", además de animar a que cuantos grupos o clubes lo deseen se sumen a "una iniciativa en la que solo queremos expresar un sí tajante al circuito". "Se nos acabó la paciencia y es hora de actuar y expresar pública y pacíficamente nuestros sentimientos y deseos de que queremos un circuito", reivindican de forma unánime. En la actualidad se trabaja en la concentración, en plena fase de preparación, prevista para el 30 de septiembre.

Carteles, camisetas, más reuniones, asistencia a próximos actos relacionados con el motor serán la antesala de la rueda de prensa previa y otras iniciativas que persiguen movilizar a la gran familia tinerfeña del motor.

En la gestión administrativa de la adjudicación de la obra, la empresa concesionaria depositó un aval de 1,2 millones de euros como garantía y desde el Cabildo de Tenerife reconocen que en un año solo se han invertido unos 160.000 euros en obras para la construcción del mismo -el plazo de obras iba a ser de 21 meses a partir del citado 29 de agosto de 2016-.

Dentro de las obligaciones del concesionario estaba la financiación de estas obras, que se materializaría mediante la aportación de fondos privados a través de este contrato de concesión por un importe de 23,6 millones de euros. No obstante, la inversión total prevista por el citando concesionario estaba cifrada en 38,8 millones de euros. El Cabildo insular ha reiterado su voluntad de sacar adelante el circuito del motor, si bien deberá resolver la situación actual.