El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha alertado este jueves de la escasez de áridos en la isla para acometer grandes obras a medio plazo, y cree que es un "reto importante" buscar una solución y ordenar la actividad.

En una rueda de prensa para dar cuenta de las obras de asfaltado de las dos autopistas de la isla, se ha mostrado partidario de seguir "produciendo áridos" y no importarlos, ya que su coste es mayor y también tiene efectos medioambientales derivados del transporte y el consumo de energía.

Ha dicho que "el Cabildo no lo puede solucionar solo" y hace falta la participación del Gobierno de Canarias y el sector empresarial, si bien ha comentado que desde el área de Aguas y la de Planificación se están realizando estudios para ver qué zonas de la isla, en razón al PIOT, puede destinarse a esa actividad.

"Hay que ordenar el problema para resolverlo", ha comentado, al tiempo que se ha mostrado a favor de la apertura de una nueva cantera, con el máximo respeto al medio ambiente, porque generaría puestos de trabajo.

El director insular de Fomento, Miguel Becerra, ha señalado que aunque se hacen esfuerzos como la recuperación de materiales o estudiar el potencial del lavado de áridos de las cuencas hidrográficas, se necesita una "cantidad muy importante", para avanzar en las obras futuras.

La isla precisa de una demanda anual de unas 600.000 toneladas de áridos, y solo hay una cantera legalizada, ya que la otra, la del Valle de Güímar, cuenta con el "consenso" de que debe cerrarse.

Según Becerra, el árido es una "materia prima fundamental" para hacer obras y ahora mismo, solo hay una cantera disponible en la isla que trabaja "casi 24 horas" y prácticamente dedicada al puerto de Granadilla. "Ahora que el parón ha acabado y se está reactivando la economía nos vamos a encontrar con que no hay materia prima", ha señalado.

En esa línea, ha dicho que "nadie quiere abrir canteras" pero en diversos puntos de la isla "se hacen pequeño picoteos desorganizados y pequeñas triquiñuelas", por lo que apuntó que es preferible que se establezca "de manera ordenada con control ambiental".

Para las obras de asfaltado de las dos autopistas hay árido suficiente y también para la construcción del túnel de Erjos o la construcción una futura pista en el aeropuerto Tenerife Sur, ya que los propios trabajos generan áridos.